Introducción

La territorialización es un proceso emergente de las relaciones entre el sistema social, económico, político y cultural, así como de la apropiación de los recursos naturales, lo que también da lugar a nuevos espacios y formas de vida sobre el territorio, otorgándole identidad y valor (Santos, 1997, 2002a). Sin embargo, estos procesos no son homogéneos, sino dispares e incluso diametralmente opuestos (Santos, 2022b). Debido a la dinámica cambiante del territorio, la producción de nuevos espacios permite a los individuos interrelacionarse con el sistema medioambiente, lo que, a su vez, les permite construir un espacio vital que finalmente determina y configura el territorio (Lefebvre, 2022).

Esta investigación aborda la falta de conceptualización sobre la territorialización en el sector rural de Acapulco. Producto del crecimiento urbano, ha habido nuevas apropiaciones de suelo y recursos naturales, generando asentamientos, fenómeno con el que se hace evidente la importancia de la perspectiva comunitaria. En otros estudios, se destaca la importancia de la territorialización para la futura gestión territorial, considerando la perspectiva comunitaria (Cueva, 2021). Además, se sugiere que la territorialización ofrece oportunidades de mejora y cambio en el territorio, lo que resulta relevante en una ciudad en expansión y dominada por el turismo (Díaz-Parra, 2023).

Esta investigación se enfoca en la Laguna de Tres Palos y utiliza la participación comunitaria como base para comprender el fenómeno socioespacial de la territorialización. La apropiación de este ecosistema por los pescadores, habitantes del sector rural de la ciudad de Acapulco y agentes externos resultó en la territorialización de la laguna mediante procesos económicos, sociales y culturales. Esto ha generado nuevos espacios dentro del ecosistema, generados por el cambio de uso del suelo. Mediante esta investigación se demuestra que los procesos territoriales (en particular, la territorialización) han ocasionado gentrificación, que se ha establecido con el tiempo y ha permeado las estructuras comunitarias de las localidades contiguas a la Laguna de Tres Palos. Así, estos procesos definen el territorio y la apropiación de los recursos naturales como elementos clave y configurativos de la territorialización.

Asimismo, se demuestra, desde la perspectiva de los participantes de diversas comunidades como El Arenal, San Pedro Las Playas, Plan de los Amates y El Bejuco, que la territorialización ha derivado de la expansión económica de la ciudad de Acapulco, que se ha extendido a las riberas de la Laguna de Tres Palos, generando cambios no planificados. Según los participantes, estos procesos no han considerado la perspectiva o la percepción de las localidades involucradas y que hacen parte del ecosistema lagunar.

En ese sentido, el objetivo es explorar la conceptualización y el proceso de territorialización de la Laguna de Tres Palos según el conocimiento local de los participantes de las comunidades de El Arenal, El Bejuco, Plan de los Amates y San Pedro Las Playas.

La geografía crítica

La geografía crítica nos brinda una perspectiva experiencial y sutil del territorio, abriendo el espacio para debatir la interacción entre los individuos y su entorno habitado (Tosto, 2023). Asimismo, nos permite examinar las construcciones coloniales que influyen en las relaciones entre el poder, el hombre y el espacio, cuestionando el enfoque de la geografía tradicional, que a menudo muestra un espacio aislado de las relaciones humanas y sin considerar las dinámicas de dominación territorial e institucional (Carroza-Athens et al., 2023). Por estos motivos, optamos por la geografía crítica en este artículo, ya que nuestro interés se centra en la territorialización y la naturaleza que se convierte en recursos naturales a través de una apropiación (Morales-Jasso, 2016). De esta forma, el concepto de territorialización ha sido debatido, cuestionado y ampliado dentro del pensamiento de la geografía humana, gracias a la perspectiva crítica (Font-Casaseca, 2020). Los espacios están sujetos a cambios y procesos de desarrollo, dominación, poder, renovación y presiones socioculturales y ambientales (Lefebvre, 2022). Es en este contexto teórico que la geografía crítica se convierte en nuestra guía para sumergirnos en cómo los procesos de territorialización en el sector rural de una ciudad generan complejas relaciones entre el modelo productivo local y el espacio habitado, que finalmente se ve modificado por fuerzas externas con distintas agendas de poder y producción (Smith, 1987; Maffini y Maldonado, 2019; Valladares-Pasquel et al., 2019). Con la geografía crítica, logramos descubrir cómo los procesos de territorialización pueden llevar a la gentrificación, pero también a la resistencia de aquellos individuos que buscan proteger y apropiarse de su espacio ante el avance del desarrollo económico impulsado por la ciudad (Mompó, 2021; Díaz-Parra, 2023). En este contexto, se manifiesta la lucha por defender la identidad y el territorio, frente a los cambios impuestos por el desarrollo económico (Mansilla-Quiñones et al., 2019).

Además, la geografía crítica nos brinda la oportunidad de emplear metodologías alternativas a las tradicionales para recopilar información y construir un cuerpo teórico propicio para el análisis (Moreano y Vela-Almeida, 2020). Es en este contexto que surge la cartografía social como una respuesta y contra narrativa a la geografía tradicional y convencional, que ha prevalecido a lo largo de la historia y ha relegado la expresión de identidad de las localidades y comunidades a través de lo cartográfico (Vélez Torre et al., 2012; Piñero-Alonso et al., 2023). Esta herramienta nos permitió vislumbrar la matriz histórica y los acontecimientos que han configurado el espacio y, en particular, cómo ha ocurrido la territorialización a lo largo del tiempo, lo que ha dado lugar a la apropiación y al desarrollo de un sentido de pertenencia (Barraclough et al., 2022; Tourinho et al., 2023). Así, la cartografía social, enmarcada en la geografía crítica, nos ha permitido navegar y profundizar no solo en la teorización y enfoque teórico de la territorialización como fenómeno geográfico y espacial, sino explorar los vínculos entre los individuos de las comunidades rurales y el ecosistema (Quiñonez Góngora, 2011; Medeiros de Almeida y Diaz Habra, 2021). Esta combinación metodológica y teórica ha enriquecido nuestra comprensión, permitiéndonos ahondar en la intrincada relación entre los actores locales y su entorno, así como capturar las dinámicas y la evolución del territorio en cuestión (Faxon et al., 2022; Paasi et al., 2022).

El conocimiento local y el diálogo de saberes otorgan una visión sobre lo que los individuos saben de su propia relación con la naturaleza, creencias, comprensiones, actitudes y prácticas del territorio y su forma de vida, los cuales se transmiten por generaciones. Este saber comprende aspectos culturales, sociales, políticos, económicos y ambientales de su espacio y territorio, así como la manera en que construyen la realidad (Haesbaert, 2013, 2019, 2020). De acuerdo con las aportaciones de McCall (2011), el conocimiento local reflexiona sobre las cosmovisiones en términos territoriales y la forma en que se toman decisiones tanto a nivel individual como comunitario. Esto permite la creación de espacios de diálogo, que se alinean al conocimiento sobre el territorio y las necesidades percibidas por las personas, así como la resistencia al modelo desarrollo imperante.

Según Filho (2022), este planteamiento está acompañado por la generación del conocimiento local que dista de las imposiciones y las influencias del sistema neoliberal, el cual introduce el despojo de los aspectos culturales y comunitarios; nuevas formas de desarrollo que no coinciden con lo tradicional ni con el saber de las personas. En este contexto, los procesos de resistencia también se desarrollan en el marco del saber local, que surge a través del diálogo de saberes.

En este conocimiento local, el diálogo de saberes incluye elementos representativos del discurso y la tradición que reflexionan y comprenden los fenómenos territoriales y cómo estos transforman las dimensiones políticas, sociales y ambientales (Levy, 2006; Moreano y Vela-Almeida, 2020). Estos cambios se evidencian a través de la oralidad, la creación y la concepción del territorio, este último vinculado a la identidad de los individuos y las comunidades. Esto conduce a la construcción de lazos de sentido de pertenencia, ofreciendo una forma epistemológica de comprender el conocimiento local, no solo como una herramienta de recolección de información, sino como una manera de explicar, examinar y entender la relación de las comunidades con el territorio, la naturaleza y las diversas formas de resistencia al modelo económico dominante (Oropeza, 2014). Este modelo permea las capas sociales hasta introducirse en lo comunitario, imponiendo nuevos órdenes económicos y políticos, amparados en el progreso y en el desarrollo. Entonces, el diálogo de saberes expone estas tensiones desde lo narrativo y lo oral (Mompó, 2021).

Metodología

Tipo de estudio

La investigación adopta un enfoque cualitativo que nos permite explorar las vivencias de las personas y cómo se han adaptado a las situaciones que han surgido en el espacio que habitan (Walker Janzen, 2022), específicamente, la Laguna de Tres Palos. En este estudio, utilizamos la teoría crítica como base para comprender cómo la territorialización del ecosistema lagunar ha evolucionado con el tiempo y cómo se manifiesta en las comunidades que lo rodean. La teoría crítica nos brindó una perspectiva reflexiva sobre los fenómenos sociales de poder y desarrollo, que considera la diversidad de escalas temporales y espaciales (Espinoza Freire, 2022). Estas escalas son fundamentales para un análisis reflexivo que abarque desde la experiencia individual hasta la colectividad (González, 2022). En conjunto, la investigación se centra en cómo los individuos, en su propio territorio, interactúan con este, de acuerdo con una perspectiva experiencial y colectiva, cuestionando las visiones tradicionales de la geografía y ofreciendo una aproximación teórica más flexible y acorde a la realidad de las personas y sus entornos (Sbardelotto y Francischett, 2022).

Caso de estudio

La investigación se centró en la Laguna de Tres Palos, un ecosistema importante para los pescadores y las comunidades colindantes. La Laguna ofrece valiosos servicios ecosistémicos, especialmente el recurso pesquero que sustenta a estas comunidades. Esta importancia convierte a la Laguna en un elemento clave dentro de la dinámica territorial y socioespacial de la ciudad de Acapulco y el estado de Guerrero (Casarrubias-Jaimez y Nogueda, 2023; Juárez-Islas et al., 2023). Los estudios de Covarrubias-Melgar et al. (2022) han señalado que el crecimiento de la ciudad y la falta de planificación urbana de la ciudad de Acapulco han afectado a la Laguna de Tres Palos y a sus comunidades. En esta investigación, exploramos el concepto de territorialización como un elemento crucial para entender los problemas socioambientales que enfrenta la Laguna. Lo más interesante de este estudio de caso es que los participantes decidieron hablar sobre su vínculo con la Laguna y el territorio comunitario, pero sin etiquetarlo o denominarlo como territorialización. Esta categoría emergente capturó nuestra atención y la tratamos como una cuestión conceptual digna de un análisis profundo, comprensión y reflexión teórica.

Aproximación teórico-conceptual: una vez identificado el concepto de territorialización, nos propusimos explorar diversas perspectivas a partir de la geografía crítica (Marino y Cheney, 2023). Decidimos analizar el concepto según esta corriente de pensamiento, ya que es la que ha profundizado su desarrollo (Filho, 2022).

Diálogo de saberes: desde el inicio del proceso de investigación, mantuvimos un diálogo de saberes que estuvo presente a lo largo del desarrollo. Siempre estuvimos conectados con el conocimiento local, pues reconocimos que este diálogo nos permitía identificar los aspectos comunitarios y locales presentes en las personas y comunidades involucradas en el estudio.

Recorridos de campos: realizamos tres recorridos a las comunidades de El Arenal, San Pedro, Las Playas y Plan de los Amates. Posteriormente, llevamos a cabo navegaciones junto a los pescadores y actores locales de cada comunidad. Durante estos diálogos, y en respuesta a nuestras preguntas, los habitantes comenzaron a identificar sitios que han experimentado cambios graduales en el territorio debido a la presión humana, lo cual permitió crear un mapa en el que se identifican las zonas afectadas.

Navegación e identificación de puntos relevantes: navegamos la Laguna tres veces con GPS en manos, identificando las zonas que los pescadores que nos acompañaron consideraron con algún problema socioambiental (Figuras 1 y 2).

Cartografía social: luego de desarrollar todo el proceso, concluimos con la realización de un taller participativo en el cual la cartografía social desempeñó un papel relevante e imprescindible. Mediante el imaginario de los pescadores y los recorridos previos que habíamos efectuado, ellos plasmaron en el mapa las zonas afectadas tanto por actores externos como internos (Castaño-Aguirre et al., 2021; Bonet, 2023).

Línea de tiempo y matriz geohistórica (MGH): la investigación culminó con la elaboración de una línea de tiempo que surgió a partir del taller participativo y los diálogos con los participantes, quienes relataron los acontecimientos que han experimentado en relación con la transformación del espacio del ecosistema lagunar (García Castro, 2019).

Resultados y discusión

Los presentes hallazgos exploran y explican el concepto y el conocimiento local de la territorialización en la Laguna de Tres Palos.

Aproximación conceptual: la territorialización de la laguna

Durante nuestra investigación, los diálogos con los participantes de las comunidades cercanas a la Laguna de Tres Palos, como El Arenal, San Pedro, Las Playas, Plan de Los Amates y El Bejuco, identificamos un proceso de apropiación y un ejercicio de poder por parte de algunos residentes de la zona en el ecosistema lagunar. Esta apropiación generó tensiones a nivel comunitario y transformó el ecosistema de la Laguna. Los participantes etiquetaron esta transformación como “lotificación”, “apropiación de la laguna” y “transformación por la ciudad”, debido a la fuerte presión causada por la expansión de Acapulco. Ciertos sectores de la Laguna se convirtieron en asentamientos humanos, debido a la expansión urbana que ha ocurrido durante las últimas dos décadas. Ante esta situación, emprendimos una búsqueda intensiva para comprender conceptualmente este fenómeno, lo que nos llevó al concepto de territorialización (Tabla 1). A través de esta búsqueda, pudimos acotar y descifrar lo que estaba sucediendo en la Laguna de Tres Palos a nivel de territorio y su entorno, basándonos en la definición proporcionada por los propios participantes y triangulada con los autores.

Con base en la triangulación, se evidencia la complejidad de la territorialización, fenómeno vinculado a factores sociales, políticos, económicos y culturales. Identificamos que la percepción de los participantes sobre la territorialización coincide con los referentes teóricos.

Identificación de la territorialización de la Laguna de Tres Palos

Para lograr identificar el proceso de territorialización de la Laguna de Tres Palos, resultó clave navegar con los pescadores y las personas que voluntariamente se unieron al proyecto de investigación. A través del diálogo, ellos compartieron sus experiencias y la conexión que tienen con la Laguna, permitiéndonos captar las necesidades de las comunidades cercanas. El aprovechamiento y el uso de los recursos pesqueros son elementos para entender cómo la Laguna ha sido objeto de territorialización a lo largo del tiempo. Sin embargo, esta territorialización ha pasado por procesos de expansión urbana y la imposición del modelo económico turístico que se ha arraigado en la ruralidad de Acapulco (Figuras 1 y 2). Estos factores han generado nuevos asentamientos que, de alguna manera, han establecido vínculos y asociaciones con el ecosistema lagunar. Asimismo, han surgido procesos de sentido de pertenencia, posesión y dominio sobre este espacio que alguna vez fue parte del contexto rural de ciudad, pero que hoy se encuentra urbanizado. Sin embargo, para las comunidades que lo han habitado, este lugar representa un nicho de apropiación significativo, que también proponen Raffestin (2005) y Rojas Casarrubias et al. (2023).

El mapa anterior nos presenta cómo la Laguna ha experimentado diversas actividades que han acotado las zonas de pesca y ampliado la barrera urbana sobre lo rural y cómo la urbanización ha impactado estas áreas de conservación. Al explorar cómo los habitantes percibían su laguna y la antropización que ha sufrido debido a la territorialización, encontramos que el río La Sabana juega un papel fundamental en la contaminación que llega a la Laguna de Tres Palos. Este río recoge las aguas residuales de la cuenca media y baja de la ciudad de Acapulco, cuestión que se valida a través del estudio de Melgar et al. (2023). Sin embargo, las presiones que la ciudad ha generado tienen que ver con la deforestación del mangle, la generación de residuos y aumentos de aguas residuales, conclusión a la que se llega de acuerdo con los participantes y con los estudios de Castillo Elías et al. (2021). La problemática es grave, ya que está asociada no solo a la pérdida de pesca, también al surgimiento de nuevos asentamientos urbanos en áreas que no deberían ser ocupadas ni urbanizadas.

En este contexto, han emergido elementos económicos locales, como las granjas acuícolas, que se han establecido aparte de la pesca. Sin embargo, estas zonas acuícolas también han generado tensiones debido a las desigualdades que provocan en las comunidades. Además, han restringido la libertad de navegación en la laguna, transformando el paisaje natural y la estética del ecosistema rural, tal como lo describen los participantes. Esta evolución ha afectado el equilibrio y la armonía que antes caracterizaban a la Laguna, cuyo entorno natural ahora se ve influenciado por factores urbanos y económicos, lo que refleja los desafíos que enfrenta este valioso ecosistema y la importancia de encontrar soluciones equitativas para su conservación, un tema tratado por los actores locales y los pescadores según Gervacio et al. (2024).

Después de emprender fascinantes navegaciones, recorridos y diálogos con una diversidad de participantes, logramos descubrir las zonas de pesca estratégicas para los pescadores, de donde obtienen su sustento. Estos lugares tienen un fuerte arraigo a nivel comunitario, pues los pescadores han experimentado un proceso de apropiación y han dado forma a este espacio, considerándolo su lugar para capturar los productos de la Laguna. Cabe destacar que la Laguna en sí misma es un bien común, de acuerdo con los planteamientos de Ostrom (2009), y que cualquier pescador puede navegar sobre esta, salvo en algunos casos en los que surgen conflictos por el espacio. Sin embargo, en estas zonas de apropiación de la Laguna por parte de las comunidades, encontramos un vívido ejemplo de cómo simbólicamente estos pescadores y personas han demostrado el profundo vínculo que los une con la comunidad y con esas áreas de pesca. También se revela la estrecha asociación del individuo con la actividad pesquera, generando en última instancia un proceso de dominio sobre ese espacio y un fuerte vínculo con su aprovechamiento y uso. Es un retrato de cómo viven estas personas la conexión con la tierra y el agua, así como el sentido de pertenencia a la comunidad, en la que se entrelazan en aras de subsistencia.

Durante estos diálogos, realizamos recorridos en lanchas dentro de la Laguna y, con la ayuda del GPS, ubicamos las áreas que han sido transformadas debido a los procesos de urbanización impulsados por la ciudad de Acapulco a lo largo del tiempo. Estas zonas, en su mayoría, corresponden al proyecto turístico Diamante. En una visión compartida por Oropeza (2014), se analiza el problema según los imaginarios sociopolíticos, que han sido un motor importante de la matriz turística de la ciudad. Sin embargo, su desarrollo se obtuvo a costa de la presión sobre los ecosistemas. A través del mapa que se construyó con los participantes de las comunidades, se pudieron detectar no solo las áreas de pesca, también las áreas transformadas debido a la acción humana en la Laguna. La comunidad pudo identificar cómo estos procesos de intervención humana, conocidos como antropización, han llevado a una pérdida significativa del recurso pesquero, así como a una transformación y territorialización debido a la influencia de la actividad humana y los cambios en el uso del suelo.

La cartografía social

Utilizamos la cartografía social para indagar en la perspectiva y percepción de los participantes a través de los procesos participativos, en los que desvelaron información notable para comprender la territorialización de la Laguna de Tres Palos; la herramienta utilizada fue propuesta por Cucurachi (2020), quien analiza cómo el trabajo colectivo develó cuestiones territoriales. A través de esta herramienta, obtuvimos un profundo conocimiento de los problemas que afectan a la Laguna, incluyendo la contaminación por residuos y descargas de aguas residuales. Estos hallazgos elevaron el problema socioambiental de la Laguna, vinculándolo con la planificación del territorio, la gentrificación urbana y la gestión del sistema lagunar.

Los participantes mostraron una actitud activa y colaborativa, lo que permitió la construcción de tres mapas participativos que revelaron la compleja interacción entre la ciudad, las áreas rurales y la subsistencia de los pescadores. Además, evidenciaron los problemas resultantes de un manejo ineficaz del ecosistema lagunar a lo largo del tiempo y diversas formas de dominación del espacio y de poder instauradas por el crecimiento de la ciudad. Lo anterior tiene directa relación con cómo se percibe el espacio y las formas de coproducción de las decisiones, según Trejo et al. (2024), asunto que, a su vez, derivó en la afectación en la Laguna por la especulación inmobiliaria y el desarrollo urbano que se ha instaurado gradualmente en la zona.

La cartografía también señaló que el problema socioambiental de la Laguna debe ser analizado dentro de un contexto político, de poder y normativo (Figuras 3, 4 y 5). La contaminación no solo se debe a la acción de los locatarios, sino a las empresas que descargan aguas residuales y las inmobiliarias que han alterado el uso del suelo para fomentar el crecimiento turístico y hotelero; esta cuestión es complementada por Gómez Villerías et al. (2021), quienes reconocen aquella como una oportunidad para el activismo. La territorialización de la Laguna de Tres Palos es, en gran medida, un resultado de la influencia del turismo y la matriz productiva predominante en la ciudad de Acapulco. Esta influencia ha llevado a una ampliación de la perspectiva del territorio y a la transformación de los usos del suelo y el paisaje, adaptándolos para satisfacer las necesidades del crecimiento de ciudad.

Los tres mapas reflejan el conocimiento espacial local (CEL) acerca de cómo las comunidades contiguas a la Laguna de Tres Palos deben lidiar con una compleja interacción entre el crecimiento urbano y la disminución de los recursos naturales, lo cual tiene una base epistemológica propuesta por McCall (2011). Además, los mapas expresan un discurso político sobre cómo abordar la problemática socioambiental y cómo el desarrollo de la ciudad de Acapulco afecta a las áreas periféricas y rurales. Los participantes reconocen que el sector rural termina siendo el receptor de la mayoría de los problemas ambientales generados por Acapulco. Parece que esta zona rural se convierte en la receptora de una serie de problemas sin gestionar y de soluciones socioambientales no planificadas, que son impulsadas por la matriz económica turística. En última instancia, estos efectos llegan al ecosistema y a las personas que conforman o se benefician de este territorio.

La línea de tiempo y matriz geohistórica (MGH)

Según los participantes, y como se grafica en una línea de tiempo, los procesos de territorialización se han desarrollado a lo largo de la historia y han establecido mecanismos de adaptación de las comunidades para el aprovechamiento del ecosistema lagunar. Sin embargo, este proceso de adaptación ha sido desafiado por el crecimiento continuo de la urbe, que ha impactado en el entorno rural y natural que rodea la Laguna y las personas que allí habitan. Este espacio ha sido modificado y adaptado con el transcurso del tiempo, sin encontrarse con obstáculos; el modelo de desarrollo que lo ha avasallado ha amenazado la identidad de estas comunidades que viven de la pesca, actividad que según Carpio-Hernández et al. (2024) está amenazada por factores climáticos.

Con el paso del tiempo, el espacio ha experimentado la creación de nuevas formas de hábitats, comunidades y personas, adaptándose a nuevos tiempos. Parece que la ciudad ha incorporado la zona rural de Acapulco, en particular en nuestro estudio de caso, que se enfoca en las comunidades junto a la Laguna de Tres Palos y su territorialización. Este proceso se presenta como una entidad que es susceptible a metamorfosear el territorio y a transformarse en un satélite de la ciudad de Acapulco. En este punto, converge otra parte del motor económico de la ciudad, representado por la zona Diamante como una forma hegemónica de mostrar la dominancia del modelo de poder y las nuevas formas que se instauran en el espacio y lo determinan, tal y como reconoce una visión propuesta por Melgar (2024). Sin embargo, a pesar de la influencia del modelo de poder y desarrollo, es importante destacar que el sentido de pertenencia y la convicción de las personas que inicialmente se asentaron en esta zona anclan a estas comunidades en su territorio, otorgándole una identidad única y resistente ante los cambios impuestos por el crecimiento urbano.

Esta MGH nos deja una profunda reflexión de los procesos de territorialización y la percepción del espacio según los participantes. A lo largo de los años, la Laguna de Tres Palos ha experimentado cambios significativos en su entorno. Inicialmente, era un lugar esencialmente rural, donde la pesca y la conservación eran importantes. Sin embargo, con el auge del turismo en Acapulco, la Laguna se vio afectada por la expansión hotelera, la pérdida de mangle y la contaminación. A medida que la ciudad crecía, la frontera entre lo urbano y lo rural se volvía difusa. Los pescadores observaron el deterioro del ecosistema y la falta de planificación adecuada para el desarrollo urbano. La Laguna enfrenta ahora desafíos sanitarios y ambientales, haciendo difícil mantener su sustentabilidad como fuente de vida y recursos naturales; esta visión expuesta también es una preocupación de Herrera-Navarrete et al. (2021).

Conclusiones

La territorialización de la Laguna de Tres Palos es un proceso complejo y dinámico que ha sido influenciado por la sobrepoblación, el crecimiento urbano y la expansión hotelera en Acapulco. La apropiación y el ejercicio de poder por parte de ciertos residentes han transformado el ecosistema lagunar y generado tensiones en las comunidades locales. Este proceso implica una interacción de factores sociales, políticos, económicos y culturales que han reconfigurado el territorio a lo largo del tiempo. La comprensión conceptual de la territorialización destaca su carácter cambiante y adaptativo en respuesta a las dinámicas humanas y socioespaciales.

El proceso de territorialización de la Laguna de Tres Palos ha estado influenciado por la interacción de las comunidades locales, quienes juegan un papel fundamental en la apropiación y uso de los recursos pesqueros. A través de navegaciones y diálogos con los participantes, identificamos las zonas de pesca estratégicas y los impactos de la urbanización y la antropización en el ecosistema lagunar. A pesar de los desafíos, destacamos un profundo sentido de pertenencia y conexión entre las comunidades y su laguna, resaltando la necesidad de encontrar soluciones equitativas para su conservación.

La cartografía social fue una herramienta valiosa para indagar la perspectiva de los participantes en el proceso de territorialización de la Laguna de Tres Palos. A través de la colaboración activa de los participantes, se obtuvo un conocimiento profundo de los problemas socioambientales que enfrenta la laguna, relacionados con la contaminación y el desarrollo urbano descontrolado. Los mapas participativos revelaron la compleja interacción entre la ciudad y las áreas rurales, así como la influencia de la matriz de poder y apropiación con respecto a la en la transformación del territorio.

La MGH reveló una evolución significativa del proceso de territorialización en la Laguna de Tres Palos. Contrario a estar en las márgenes del proyecto de desarrollo turístico y económico de Acapulco, la laguna se ha convertido en un centro del proceso de transformación territorial y económica de la ciudad. Esto ha resultado en un fenómeno de gentrificación y cambios no planificados en el ecosistema lagunar, generando presiones en las comunidades locales. Sin embargo, también ha fortalecido el sentido de pertenencia y apropiación del suelo por parte de dichas comunidades para mantener su sustento.

Referencias

Notas

* Artículo de investigación científica

Notas de autor

^a Autor de correspondencia. Correo electrónico: juan.cardona@uaq.mx

Información adicional

Cómo citar: Cardona Castaño, J. C. (2025). Territorialización de la Laguna de Tres Palos según el conocimiento local de las comunidades (Acapulco-México). Cuadernos de Vivienda y Urbanismo, 18. https://doi.org/10.11144/Javeriana.cvu18.tltp

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