Fez: entre la cultura de la ciudad y el festival de música sagrada del mundo*

Fez: Between the City Culture and the World Sacred Music Festival

Apuntes: Revista de Estudios sobre Patrimonio Cultural, vol. 32, núm. 2, 2019

Pontificia Universidad Javeriana

Ikrame Selkani a

Universidad de Córdoba, España


Recepción: 26 Enero 2017

Aceptación: 09 Febrero 2019

Publicación: 09 Septiembre 2019

Resumen: Desde su creación en 1994, el éxito del Festival de la Música Sagrada del Mundo, promovido por la Fundación Espíritu de Fez, ha traspasado las fronteras de Marruecos. Este acontecimiento ofrece un amplio abanico de cantos y música espirituales, y pretende transmitir el espíritu de Fez, capital cultural que valoriza el intercambio entre las civilizaciones.

Este festival se ha consolidado como uno de los más importantes de las músicas del mundo, y fue reconocido en 2001 por la ONU por el importante papel que desempeña en la promoción del diálogo de las culturas y de las religiones.

Los encuentros de Fez reúnen a intelectuales, científicos y humanistas en torno a un tema determinado. Abiertos a un amplio público, son objeto de intercambios, diálogos y debates a la sombra de un majestuoso roble del museo Batha.

Palabras clave:Fez, festival de música sagrada, cultura, patrimonio, Marruecos.

Abstract: Since its creation in 1994, the success of the World Sacred Music Festival, fostered by the foundation Fundación Espíritu de Fez, has gone beyond the Moroccan borders. This event provides a wide gamut of spiritual chants and musics and seeks to convey the spirit of Fez, a cultural capital that values the exchange of civilizations.

The festival has been consolidated among the most important of the world music festivals and was recognized in 2001 by the UN because of its important role in promoting the dialogue between cultures and religions. The encounters in Fez bring together intellectuals, scientists and humanists around a specific topic. Open to a wide public, their works are object of exchange, dialogues, and debates under the shades of a majestic oak tree at the Batha Museum.

Keywords: Fez, sacred music festival, culture, heritage, Morocco.

Introducción

Debido al posicionamiento geográfico del país de Marruecos y su cercanía con el continente europeo, 14 km, Marruecos siempre ha sido abierto a la cultura extranjera y dispuesto para aprender y debatir con nuevas civilizaciones. Fez, como ciudad, sigue manteniendo sus tradiciones y sus costumbres. La ciudad recibe turistas nacionales e internacionales, y sobre todo turistas culturales, interesados en los productos y actividades orientadas a la cultura que se manifiestan allí durante el año. Respecto a diferentes destinos turísticos del Reino de Marruecos, Fez está en el nivel sexto nacionalmente, precedido por Marrakech, Agadir, Casablanca Tánger y Rabat, y seguido por Essaouira, Tetouan, El jadida y Chefchaouen.

En comparación con las otras ciudades marroquíes, Fez tiene dos grandes ventajas: el turismo cultural y la artesanía (como oficio), unas de las actividades más importantes para la economía de la ciudad. El turismo de Fez ofrece la oportunidad de hacer un intercambio de culturas y un diálogo de civilizaciones. El festival de Fez, uno de los eventos organizados por la Fundación Espíritu de Fez, busca valorizar el patrimonio cultural y promover la imagen de la ciudad, a nivel nacional e internacional, como centro de paz y diálogo intercultural. La intención de la ciudad de Fez al organizar este evento memorable es dar valor a su historia y compartirla en forma de música, teatro y diversas manifestaciones culturales, con el amor y la paz como temas universales, articulados en la música y las artes escénicas en la industria creativa. En general, los festivales de música son una animación cultural en crecimiento y un “argumento” para el visitante turístico. Durante estos últimos 20 años, Marruecos ha experimentado el nacimiento de varios festivales: Festival de Gnaoua y música del mundo de Essaouira, 1998; Festival de música Sagrada del mundo de Fez, 1994; y Festival internacional de la película de Marrakech, 2001. El objetivo de estos festivales desarrollar la idea del turismo cultural y también mejorar la imagen de cada ciudad, de forma que las planificaciones estratégicas de las ciudades marroquíes consistía organizar por lo menos un festival en cada ciudad por las grandes ventajas que presentan: económicas, turísticas y políticas. La estrategia turística, elaborada en 2010, buscaba aumentar el número de turistas y la duración media de la estancia, y para ello había que crear actividades culturales. Ahora, en 2020 la ambición de Marruecos es formar parte de los 20 destinos mundiales principales, y de esta forma incrementar el PIB nacional por 2 puntos más, para llegar a 140 mil millones de dírhams en el sector turístico, crear 470.000 nuevos empleos directos, generar interés por parte de los países emergentes, y doblar la cifra de turistas de origen europeo. El papel de los productos culturales en general, y de los festivales es, sobre todo, crear una imagen positiva que sirva para atraer más turistas. El Ministerio de la Cultura organiza múltiples festivales temáticos, con el objetivo de orientarse más hacia el patrimonio inmaterial representado en la música antigua. De este modo, los festivales comienzan a tener una gran demanda por la cantidad de actividades gratuitas y pagadas. La mayoría se organizan durante todo el año, un poco menos en invierno y otoño, debido a que su puesta en escena se hace en la calle. La semana que dura el festival se constituye en un espacio de encuentros de espectáculo poético, coreográfico y musical. El festival integra exposiciones, noches sufís, animaciones y actividades artísticas para los niños. En este apartado, entonces, vamos a ver dos secciones muy importantes. La primera hablará con mayor detalle sobre Fez como ciudad marroquí, y su valor añadido en comparación con las demás. Posteriormente, en la segunda sección, se presentará el Festival de Música Sagrada del Mundo y se desarrollará su historia desde el arranque de este evento, indisociable de la ciudad de Fez.

El festival de Fez de Músicas Sagradas del Mundo es el primero que se organiza en un país musulmán. Sucede durante los meses de mayo y junio, y cada año tiene una programación específica. Consagra su mayor esfuerzo en la música sagrada y compartir este tipo de actividades con diferentes países del mundo. Los festivales como el de Fez son una estrategia desarrollada por el gobierno marroquí para consolidar su cultura y, a la vez, impulsar industrias culturales que fomenten el desarrollo económico de Marruecos.

La ciudad de Fez

Marruecos se representa como un espacio donde muchas culturas coexisten desde siempre, entre ellas, la árabe, bereber y judía.

Esta pluralidad cultural que se manifiesta hace de marruecos un país predispuesto a ser receptivo con manifestaciones provenientes de otros lugares. Marruecos tiene una historia y una posición geográfica que le permiten representar un espacio de intercambio y comunicación entre las diversas culturas, es un país abierto a diferentes contactos y relaciones internacionales que juegan a su favor. La capital cultural y espiritual del Reino de Marruecos es Fez, una ciudad imperial marroquí que tiene una historia muy amplia y rica de eventos desde. La medina de Fez es muy especial, edificada en el siglo IX por el imán Muley Idriss II, y clasificada por el Patrimonio Mundial de la Humanidad en su totalidad. Todos los monumentos actividades y comerciales que se organizan en la ciudad de Fez son muy especiales, ya se relacionan con la historia de esta ciudad. Marruecos, entonces, se representa tal como un gran terreno donde diferentes poblaciones y culturas han habitado y vivido juntos desde hace muchísimos años. Y debido a su apertura mundial de civilización árabe musulmana se ha entendido que Marruecos, como país, posee estas ventajas de atractivo cultural y turística (Essakali y Maurin, 1985). Dentro de esta sección, entonces, vamos a desarrollar dos partes muy importantes. En primera instancia, se hablará de la historia de la ciudad de Fez, para conocerla mejor. Y en segunda, se contextualizará en una parte de la cultura de la capital.

La historia de Fez

Fez es una ciudad marroquí imperial que ha cuidado muchísimo su historia. Allí se construyó la primera universidad en el mundo árabe, la Universidad Al Karaouine, que comenzó su construcción en el año 857 por Fátima el Fihri. Esta institución cuenta con una biblioteca y una mezquita muy grande, que aporta riqueza patrimonial a la ciudad de Fez. El movimiento de gente que sucede en esta ciudad es mayormente turístico, debido a los porcentajes elevados de visitantes nacionales que vienen a Fez para visitar su medina, junto con las demás partes de la ciudad, antiguas y ricas en historia. La ciudad está caracterizada por un turismo de tipo cultural-religioso y espiritual. Fez fue objeto de atención, especialmente en el año 2008, por la celebración de sus 1200 años de existencia, y por el interés y el cuidado que ha mostrado en la preservación de su cultura y su historia.

El visitante que llega a la ciudad puede caracterizarse como un entusiasta cultural, por esta razón, se intenta presentar y preservar la autenticidad de la cultura árabe, y especialmente la fasí (Señor Fache D., ex presidente del Centro Regional de Turismo de Fez). Marruecos es de los pocos países que tienen como ventaja una situación geográfica excepcional, por su localización entre dos mares, el Atlántico y el Mediterráneo, la cercanía al continente europeo, a tan solo 14 km, y a los a los países de al lado, en el continente de Africano. De allí viene el nombre árabe verdadero, Almagrib al Aksa, que es realmente la posición geográfica de Marruecos en África, un país atlántico, africano, occidental y sahariano. Fez es una ciudad imperial de Marruecos, una guardiana de las tradiciones y de la memoria hispanoárabe. Gracias a su posicionamiento estratégico geográfico y su posibilidad de atraer a poblaciones inmigrantes que enriquecen su cultura, hoy en día se considera a Fez como ciudad heredera de una larga historia, seguida por Casablanca, el centro económico de todo el Reino de Marruecos, y luego Rabat, la capital política del país.

La cultura de la capital espiritual de Marruecos: Fez

Fez tiene una medina muy antigua, que representa un espacio tradicional y auténtico que aporta valor a la riqueza patrimonial que tiene esta ciudad. Durante todo este tiempo, la ciudad ha preservado sus tradiciones, que se han convertido en la cultura y la identidad fasí. Ocupando el sexto lugar de los destinos marroquíes, según el Observatorio de Turismo de Marruecos, Fez se caracteriza por flujos turísticos realmente favorables, de forma que esta ciudad representa un destino cultural donde los turistas se adaptan y disfrutan de su aspecto sociocultural. El patrimonio cultural material e inmaterial que define la ciudad se convierte en un gran atractivo para los turistas extranjeros que se sienten atraídos y motivados a visitar la ciudad. Fez ostenta fortalezas turísticas que contribuyen a su desarrollo, como su patrimonio natural e histórico-cultural reconocido al nivel nacional e internacional

    La ciudad de Fez conoce diferentes tipos de turismo:
  1. Turismo itinerante o de circuito, donde el principal atractivo es la medina de Fez, para visitar sus monumentos irremplazables.

  2. El turismo de descanso y de cura. Fez cuenta con dos fuentes termales: Mulay Yacoub en el noroeste, y Sidi Harazem en el suroeste. Este tipo de turismo se ha desarrollado mucho por la belleza de sus paisajes de la ciudad y las virtudes terapéuticas de sus aguas.

  3. El turismo de Congreso. Sin menospreciar la importancia de las ciudades como Rabat, Casablanca o Marrakech, la ciudad de Fez está también reconocida por sus reuniones y congresos nacionales e internacionales.

  4. Turismo de montaña. En el mediano Atlas y en la zona de Michlifen hay diferentes rutas de senderismo: el centro de Ifrane, que está a 60 km de Fez, el centro d’Immouzer Kandar, qué está 35 km, reconocido como un punto de esquí, donde se encuentran sitios naturales como lagos y grandes bosques, y el centro de Sefrou, que está a 28 km, y es conocido por sus cascadas y su Fiesta de la Cereza.

  5. Turismo de deporte. Principalmente golf y deportes náuticos.

La medina de Fez, reconocida por su patrimonio universal, se nombró ciudad museo y una de las grandes metrópolis islámicas reconocidas por la Unesco en 1979. También, en 1980 la ciudad toma la decisión de guardar y preservar su riqueza patrimonial y su vida social que se celebra y manifiesta en todas las calles, para recordar su cultura antigua y sus tradiciones inolvidables. De esta forma, la Unesco ha hecho un llamado internacional para la preservación de la medina de Fez, que ha sido clasificada como ciudad de Patrimonio Mundial. En esta época se llevaron a cabo acciones de renovación y rehabilitación, importantes para realizar una protección de alto nivel a los monumentos de la ciudad, con el objetivo de restaurarlos y de revalorizar el patrimonio histórico y cultural, participando de forma directa o indirecta en el avance de los flujos turísticos. El desarrollo de la ciudad de Fez, y de la región en general, ha generado un resultado en el turismo cultural que generó una gran reputación desde hace décadas, gracias a las estrategias de revalorización de los monumentos y lugares turísticos. Esto causó un impacto económico muy grande en la ciudad y generó una imagen real, positiva, y muy favorable de la misma. Estas acciones de rehabilitación presentaron una ventaja grande respecto al desarrollo turístico local y regional, para que sea más competitivo y aumente su contribución al desarrollo económico y social del país en general. Los monumentos culturales en la ciudad de Fez son múltiples. La medina de Fez posee muchas medersas, y las más conocidas son la Bouinania, construida en 1351; La Attarine, en 1331; La Mesbahia, 1346, y la Cherratine del siglo XVII. Antiguamente estos establecimientos recibían estudiantes extranjeros de diferentes universidades conocidas. Por otro lado, La biblioteca Qaraouiyine, construida en el siglo XIV, completa el ciclo cultural. Sus libros provienen de diferentes partes del planeta (Ibn Rochd, Ibn Khatib, Ibn Arabi, Ibn Ahmar, etc.). En 1613 la biblioteca tenía más de 32.000 libros, a veces únicos y en pocos ejemplares.

En la actualidad, Fez es la capital espiritual, intelectual y cultural de Marruecos. Decana de las ciudades imperiales, Fez sigue siendo, sin duda, la más auténtica de las ciudades del norte de África, la ciudad milenaria que contiene tesoros del arte musulmán árabe (“Fès: L’ancienne médina”, 2004).

También, de acuerdo con estadísticas de la Ader, en Fez habría unos 160.000 habitantes dentro de las paredes de la medina Fez el Bali. El idioma oficial es el árabe, aunque el dialecto marroquí se suele usar. Muchos fasís entienden y utilizan regularmente la lengua francesa, que es la segunda oficial de Marruecos. El clima de la ciudad es continental. La ciudad de Fez es conocida por sus comerciantes, artistas y artesanos que en muchos casos aún continúan sus negocios. Varios distritos, especializados de acuerdo con los gremios de artesanos, son el motor de la actividad de la ciudad. Esta organización empresarial ha existido desde la época de los almohades, o incluso la de los almorávides

Los artesanos fueron agrupados por especialidad en los diferentes barrios de la medina, como bushel, joyas, objetos de bronce, sedas, cerámica, prendas de cuero, etc. Fez también es considerada la capital de la gastronomía marroquí. Las influencias andaluzas, bereber, judías y árabes han hecho de la cocina fasí una mezcla de sutileza e imaginación en la unión de diferentes culturas. Una variedad de sonidos y canciones tradicionales (música de baile andaluz y canciones bereber) también cruzó el corazón de la ciudad de Fez.

El Festival de Música sagrada del mundo. Fez, Marruecos

El Festival de música sagrada del mundo está concebido como un encuentro anual que se organiza en la capital espiritual de Marruecos: Fez, se inscribe en una misión universal de paz y reconciliación entre las poblaciones del mundo. Desde hace ya más de una década, el corazón de Fez, cada año y durante una semana del mes de mayo o de junio, despierta con los ritmos de la música y de los cantos que se mezclan para dar lugar a un espectáculo único que se desarrolla en todas las partes antiguas de la ciudad: la medina en la plaza Bab al mákina (Kabbaj, 2011; “Entretien avec Mohamed Kabbaj”, 2010). Este festival se inscribe dentro de una estrategia largamente pensada por la región Fez-Meknès para vender mostrar a Fez como una ciudad auténtica y atraer a ella más turistas de una forma cultural e inteligente. En este apartado, entonces, vamos a dedicar la primera sección a la historia y el arranque del festival, sus comienzos desde la primera edición, y luego vamos a ver, en una segunda sección, su desarrollo en el tiempo.

La historia y el arranque del festival de Fez y música sagrada del mundo

Ante todo, la música es una forma de expresarse y transmitir mensajes, cuando se dirige al hombre busca su espíritu y su interior (Kabbaj, 2011; “Entretien avec Mohamed Kabbaj”, 2010). El Festival de Música Sagrada del Mundo es uno de los fórums más populares para ello. De esta forma, comenzó el festival con una voluntad de encontrar un sitio donde pueda surgir un diálogo y un respeto mutuo entre las civilizaciones del mundo y, al mismo, tiempo proteger y preservar la diversidad de las personas y de las culturas. En 1994 se creó la primera edición del festival, desde el 3 hasta el 14 de octubre. El diálogo es esencial, y la unidad humana es la llave de la coexistencia, la comprensión, la reconciliación, el acuerdo y la paz duradera. El festival presenta una puerta abierta a las civilizaciones y las culturas a través de las tradiciones musicales sagradas. Establecer un diálogo intercultural y la alianza de las civilizaciones fueron las motivaciones para crear el Festival de Música Sagrada del Mundo.

Desde el diálogo nace una interacción, un intercambio, que enriquece el espíritu de compartir y expandir la visión del mundo y ampliar el conocimiento que tenemos de nosotros mismos (Bennani, 2010).

Con el nacimiento del Festival Fez surgió la apertura a la hospitalidad y la coexistencia pacífica que permite construir la paz mundial. El fundador del festival Mohamed Kabbaj hizo del diálogo de civilizaciones y de las culturas el credo para resucitar un humanismo mundial como forma de expresar y desear que los hombres vivan fraternalmente unos con otros, y superar la ignorancia y la denegación. A partir de 1994 el festival de Fez milita en esta dirección de acercamiento humano, pues las virtudes de la música ayudan a la convivencia y favorecen la cohabitación y la fomentación de la fraternidad entre las religiones y los valores espirituales, de forma que el festival que se organiza en Marruecos transmite una entidad marroquí unificada y rica, donde la ciudad de Fez se vuelve un espacio de encuentros y de intercambio entre oriente y occidente. La ciudad de Fez, capital científica y espiritual, primera ciudad árabe y musulmana es el lugar donde los componentes de diferentes culturas amazigh, árabe-islámica, judía, andaluza y afro-saharaui se han encontrado.

Desde su fundación en el año 808, la ciudad de Fez fue sede de grandes figuras históricas que marcaron a toda la humanidad; hombres musulmanes, cristianos o judíos, como Maimónides, el gran reformador del judaísmo, Ibn Jaldún, el gran historiador, el filósofo y político musulmán Ahmed Baba Tambouctou, Alem, autor de la historia de Sudán, el Papa Silvestre II, el filósofo Averroes, médico, abogado y teólogo islámico; la lista es larga. Por lo tanto, y como tan bien la presentó el señor Jorge Sampaio, Alto Representante para la Alianza de Civilizaciones de la ONU, la ciudad de Fez es, por su antiguo legado, cruce de culturas, influencias, tradiciones, raíces e identidades, un verdadero crisol de los componentes de la Alianza de Civilizaciones.

Estas son las razones que contribuyeron a la creación del Festival de Fez de Músicas Sagradas del Mundo en los años 90 del siglo pasado, especialmente cuando la Primera Guerra del Golfo pasó una nueva página en las relaciones internacionales.

Aquí se convirtió en lógica enfatizar las necesidades de la alteridad, el diálogo intercultural y la alianza de civilizaciones, pues las opiniones pueden ser diferentes, así como los principios y valores. El diálogo analiza estas diferencias y nos permite aprender de aquellos que no ven el mundo de la misma manera que nosotros. Cuando el diálogo se produce, nace una interacción, un intercambio instructivo y enriquecedor, que abre la mente y fomenta el intercambio de ideas y respeto a los demás. Este intercambio es una forma de explorar los diferentes procesos de pensamiento por medio del cual percibimos y entendemos cosas, amplía nuestra visión del mundo y profundiza en el conocimiento paralelo de uno mismo. Este contexto es una de las razones de la creación de la Fundación Enamorado de Fez, donde se cristaliza esta necesidad de la alteridad y de profundización en el diálogo.

Vivimos en un mundo regido por la globalización y marcado por un aumento de la interdependencia. El encuentro entre los pueblos y las culturas es inevitable. Optamos por la música, que, parafraseando el famoso poeta indio y premio Nobel, Rabindranath Tagore, llena el infinito entre dos almas. Los grupos de músicos de todo el mundo vienen al Festival de Fez a centrarse en la realidad y la posibilidad de que los seres humanos vivan en hermandad y la paz.

El desarrollo del Fez a través de los años y el tiempo 1994-2016

El Festival de Fez de música sagrada es el evento más representativo de la Fundación espíritu de Fez, que hace esfuerzos para valorizar el patrimonio cultural y la imagen de la ciudad a nivel nacional e internacional como centro de paz, de diálogo y creación. En festival hay algunas actividades gratuitas y otras pagadas. Pensando que la cultura tiene que ser accesible para todo el mundo, el festival propuso, gratuitamente al gran público, algunos conciertos, exposiciones y noches de música, sin olvidar las animaciones pedagógicas y artísticas para los niños.

El Festival de Fez de música sagrada integra desde su creación, en 1994, la voluntad de instaurar el diálogo y el respeto mutuo entre las civilizaciones y de preservar la diversidad de las personas y de las culturas. Durante sus primeras ediciones, el festival se celebraba durante cuatro o cinco días, y en los últimos años, llegó a durar hasta una semana. Se celebra una música ceremonial y un tanto misteriosa, donde las presentaciones se hacían y se siguen haciendo en dos plazas muy importantes de la ciudad: Bab al makina y plaza Boujloud, lugares de convergencia para compartir las tradiciones y las culturas del mundo.

Desde su inicio, el festival ofrece a la humanidad ocasiones memorables en las que no queda lugar para estereotipos, donde cada uno viaja a través de las culturas y las tradiciones gracias a la música y el canto: momento memorable entre el artista y su público, de hecho, la temporada global del festival tiene una agenda muy apretada entre las exposiciones, las actividades pedagógicas para los niños, las noches de canto y los conciertos, sin olvidar el fórum, donde se mezclan las teorías de la política, arte, música y paz, para una reflexión filosófica, espiritual y global.

En Fez, la ciudad de Artes por definición, la capital cultural y espiritual del Reino de Marruecos durante este festival, la promoción del arte se hace en todas sus formas, y el objetivo es sensibilizar a los niños con actividades pedagógicas porque ellos representan las generaciones de mañana, actividades a través del arte en todos sus colores haciéndoles participar en talleres, exposiciones, carnavales, conciertos y espectáculos. Luego, para los adultos, se comparte el programa del festival, lo que suscita la emoción por gran parte de los asistentes, que pueden participar en actividades relacionadas con la música, en gran parte, sin olvidar otras disciplinas culturales y artísticas como el diseño, el arte plástico y la fotografía. Por la gran diversidad de actividades que presenta el festival y su gran calidad, al lado de festivales internacionales que aseguran la paz y la seguridad a través del mundo, la ONU destacó en 2001 el Festival de Fez de Músicas Sagradas del Mundo como uno de los eventos que han contribuido de una forma remarcable al diálogo de civilizaciones.

De hecho el festival ha ganado muchos premios internacionales: premio de la Fundación Ousseimi de la tolerancia en 2006, por su contribución pacífica a un mundo más tolerante, con valores comunes y universales hechos para compartirse cada año con la misma fuerza; Premio Mediterráneo en 2009, por contribuir en la cultura, la ciencia, la investigación y el diálogo internacional e interreligioso, papel indispensable para tener un proceso histórico remarcable, tanto de cada país representado por los artistas y, sobre todo, de la historia de la ciudad de Fez, donde se organiza el festival, que hoy en día es un patrimonio de la humanidad, donde cada uno se siente identificado, por lo que Fez se ha vuelto el lugar de encuentro de todos los enamorados y los apasionados por la música sagrada y espiritual, que perciben la ciudad como el lugar donde cohabita toda la gente, todas las religiones y todos los sueños a futuro que aún siguen manteniendo la llama del pasado.

Desde hace tiempo, el Reino de Marruecos era un espacio de mestizaje de todas las culturas y las religiones, virtud que creó su identidad y sus valores como la tolerancia, apertura al mundo y respeto a las diferencias. Fez es la primera ciudad árabe y musulmana que hizo el crisol de diversos componentes de culturas como la amazigh, árabe, islámica, judía, andaluza, africana y saharaui, que se han encontrado y fundido (Bennani, 2010). Este festival fomentó una travesía de gente por océanos y continentes para descubrir las grandes tradiciones y civilizaciones de cada uno teniendo en cuenta los principios claves siguientes: instaurar el diálogo y el respeto mutuo entre las civilizaciones, preservar la diversidad de personas y de culturas, confrontar la herencia tradicional con la universal y fomentar el compartir de ideas y visiones.

Conclusión

Los festivales tienen un impacto muy grande en las ciudades que los organizan. El festival es uno de los productos y actividades culturales que tienen una misión muy importante: promocionar la imagen de la ciudad para una mejora de los ámbitos: económico, turístico, social, cultural, etc. Los lugares donde se desarrollan los festivales tienen una gran importancia, pues son turísticos y tienen una historia que compartir. Concretamente, el Festival de Fez se conoció por la Plaza Bab al Makina, uno de los lugares más importantes de la ciudad, donde se organiza una de las noches de música sagradas del festival. Este tipo de eventos vuelven otra vez con más fuerza después de una ausencia muy grande, el número de ellos se expande por todo el territorio marroquí, donde son financiados por el Estado y por patrocinadores privados. La fuerza del festival dentro del territorio marroquí es que tiene una demanda muy importante cuando el festival es gratis, y es también un reconocimiento del festival como una inversión muy grande, donde colaboran el sector público y el privado. También, la aportación del Ministerio de la Cultura ayuda muchísimo al desarrollo de festivales a lo largo del año. La estrategia que tienen los festivales en la actualidad se denomina Turismo de 2020, una de las más importantes y nacionalmente reconocida para el sector de turismo primero, y luego para promocionar la imagen de cada ciudad del Reino de Marruecos. Sin embargo, el sector cultural y los festivales tienen algunos puntos débiles, como la ausencia de una estrategia global que les permita hacer esfuerzos para desarrollarse y mejorar a lo largo de los años, y también tienen una amenaza importante, que es que la subvención no está muy bien gestionada. La estrategia global de estos festivales es construir una imagen de Marruecos como país festivo, con tolerancia, que promueve el diálogo y pone la cultura dentro del proceso de estrategia global como un argumento sociopolítico y económico para la mejora de las regiones del país. La ciudad de Fez está situada en una región estratégica de fortalezas naturales, históricas y culturales destacables, es una ciudad imperial clasificada como Patrimonio Universal, que tiene muchos monumentos históricos y recibe turistas de nivel nacional e internacional. Las ciudades patrimoniales se encuentran ante la disyuntiva y la necesidad de hacer frente a varios retos que tienden a favorecer el desarrollo local, entre los que sobresalen aprovechar el crecimiento constante del componente cultural en los desplazamientos turísticos, alcanzar la necesaria revitalización económica de los centros históricos, conseguir la recuperación y puesta en valor de los ricos bienes arquitectónicos, lograr la atracción de inversiones complementarias al amparo de la puesta en explotación de los recursos culturales, no sobrepasar las capacidades de carga y padecer pérdidas de imagen turística (Abellán, 2001). El turismo cultural constituye una salida viable, un motor de los intercambios culturales que supone una intercomprensión, es decir tolerancia, respeto mutuo, etc.

En Marruecos, país emergente, el turismo cultural representa, ante todo, una riqueza económica considerable, siempre y cuando se parta de la nueva actividad en la sociedad receptora, de un buen diseño a largo plazo y del intento de lograr una fórmula sostenible entre otras premisas. Es decir que, junto a la contemplación de las tendencias y los beneficios, también generadores, deben de valorarse también los problemas generados por el uso del patrimonio y de la actividad turística. Sobre las comunidades receptoras, solo planificando se puede lograr el necesario equilibrio entre uso, gestión y rentabilidad (Abellán, 2001).

En este sentido, preservar los modos de vida parece ser una prioridad, así como la preservación del patrimonio arquitectónico que caracteriza a la ciudad de Fez. La fluidez en el turismo dentro de la medina de Fez y prepararse para los intercambios culturales que siguen parece indispensable para la preservación cultural de los mismos.

Referencias

Abellán, A. C. (2001). Turismo cultural y desarrollo sostenible: análisis de áreas patrimoniales. Murcia: Universidad de Murcia.

Bennani, O. (2010, 29 de marzo). Le dialogue la clé de la coexistence, la compréhension et l’entente. Le Matin.

Entretien avec Mohamed Kabbaj, Président de la Fondation Esprit de Fès. (2010, 4 de junio). Le Matin. Recuperado de https://lematin.ma/journal/2010/Entretien-avec-Mohamed-Kabbaj-President-de-la-Fondation-Esprit-de-Fes_Un-succes-interpelle-un-autre/134332.html

Essakali, L., y Maurin, H. (1985). Le Mémorial du Maroc (Vol. 1). Washington, D. C.: Nord Organization.

Fès: L’ancienne médina dotée de panneaux de signalisation. (2004, 17 de junio). L’economiste. Recuperado de https://www.leconomiste.com/article/65279fes-l-ancienne-medina-dotee-de-panneaux-de-signalisation

Kabbaj, M. (2011). Festival de Fès de musiques sacrées du monde, 2010. Marrakech: Centre Marocain Interdisciplinaire des Etudes Stratégiques et Internationales.

Notas

* Artículo de reflexión

Notas de autor

a Autora de correspondencia. Correo electrónico: selkani.ikrame@gmail.com

Información adicional

Cómo citar este artículo:: Selkani, I. (2019). Fez: entre la cultura de la ciudad y el festival de música sagrada del mundo. Apuntes, 32(2). https://doi.org/10.11144/Javeriana.apc32-2.fccf

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