Los elementos de la gramática de la lengua ckunza de San Pedro de Atacama*

The Elements of the Grammar of the Ckunza Language of San Pedro de Atacama

Elementos da gramática da língua ckunza de San Pedro de Atacama

Elizabeth Torrico-Ávila

Los elementos de la gramática de la lengua ckunza de San Pedro de Atacama*

Signo y Pensamiento, vol. 41, 2022

Pontificia Universidad Javeriana

Elizabeth Torrico-Ávila a

Universidad de Atacama, Chile


Recibido: 03 junio 2020

Aceptado: 13 diciembre 2021

Publicado: 30 noviembre 2022

Resumen: El ckunza de los Lickan Antai que habitan Chile, Bolivia y Argentina fue declarada extinta. Sin embargo, se argumenta que reconstruir los elementos de la gramática podría facilitar su revitalización. Este artículo busca dar cuenta de estos elementos en el ckunza de San Pedro de Atacama. Para ello, se entregará una revisión de los elementos fonéticos, fonológicos, léxicos, semánticos, morfológicos y sintácticos de la lengua amerindia. Este análisis informa además de la característica aglutinante del ckunza. El corpus de esta investigación proviene de las muestras recolectadas por los pioneros en su estudio. El objetivo de esta revisión es mostrar la gramática del ckunza, ya que su reconstitución proveerá las reglas que permitirán crear nuevas oraciones que contribuirán a su revitalización.

Palabras clave:elementos de la gramática, ckunza, revitalización lingüística, minorías lingüísticas.

Abstract: The Ckunza of the Lickan Antai people inhabiting Chile, Bolivia and Argentina has been declared extinct. However, it is argued that reconstructing the elements of the grammar could facilitate its revitalization. This paper seeks to account for these elements in the ckunza of San Pedro de Atacama. To this end, a review of the phonetic, phonological, lexical, semantic, morphological and syntactic elements of the Amerindian language will be provided. This analysis also informs about the agglutinative characteristic of Ckunza. The corpus of this research comes from the samples collected by the pioneers in its study. The aim of this review is to show the grammar of Ckunza, since its reconstitution will provide the rules that will allow the creation of new sentences that will contribute to its revitalization.

Keywords: grammar elements, Ckunza, linguistic revitalization, linguistic minorities.

Resumo: O ckunza dos Lickan Antai que habitam o Chile, a Bolívia e a Argentina foi declarado extinto. No entanto, argumenta-se que reconstruir os elementos da gramática poderia facilitar sua revitalização. Este artigo visa dar conta destes elementos no ckunza de San Pedro de Atacama. Para isso, entregar-se-á uma revisão dos elementos fonéticos, fonológicos, léxicais, semânticos, morfológicos e sintáticos da língua ameríndia. Esta análise informa, além, da caraterística aglutinante do ckunza. O corpus desta pesquisa vem das amostras coletadas pelos pioneiros em seu estudo. O objetivo desta revisão é mostrar a gramática do ckunza, pois sua reconstituição fornecerá as normas que permitirão criar novas orações que contribuirão para sua revitalização.

Palavras-chave: elementos da gramática, ckunza, revitalização linguística, minorias linguísticas.

Introducción

Este artículo tiene como objetivo reconstituir los elementos de la gramática de la lengua ckunza de San Pedro de Atacama. Ello se logrará al recopilar los estudios previos realizados por los pioneros en el área (Álvarez, 1996; García, 2005; Lehnert, 1987; 1994; Mostny et al., 1896; San Román, 1890; Segovia, 2012; Torrico-Ávila, 2019; Vaïsse et al., 1896; Vilte, 2004), con el propósito de examinar las muestras de la lengua amerindia que llegan hasta la actualidad. De esa forma, el artículo se divide en cuatro secciones. Primero, la contextualización del ckunza que informa del estado actual de la lengua indígena. Segundo, se da cuenta del estado de los diferentes elementos de la gramática de la lengua, tales como el léxico, la fonética y fonología, la morfología y la sintáctica. Se evidencia, además, la característica de lengua aglutinante en que se clasifica el ckunza. Finalmente, se discuten los resultados obtenidos a la luz de las muestras de la lengua disponibles para su estudio. Se concluye el artículo resumiendo los resultados obtenidos gracias a la presente recopilación, se reconoce la contribución que el presente estudio puede realizar al trabajo de revitalización del ckunza y se sugieren caminos que la futura investigación en el área puede tomar.

Contextualización

Ckunza, que significa “nuestro” en esa lengua indígena, fue el nombre designado por San Román (1890:5-6). El origen de este idioma ha sido rastreado por Lehnert, quien señala que la lengua del pueblo Lican Antai de San Pedro de Atacama:

puede localizarse en la cuenca hidrográfica de del Salar de Atacama y sectores adyacentes compuestos por pequeños valles tipo oasis y por ayllos dispersos en el sector, ubicados al interior de la provincia de El Loa. (1987, p. 104))

Lehnert (1987) también menciona que la lengua se encontraba vigente en Salta y Jujuy, poblados pertenecientes a Argentina, cercanos a la frontera boliviana. Otros autores han revelado que, aun cuando los atacameños se movieron hacia el norte y habitaron la región de Tarapacá en Chile (d’Orbigni, 1839; Darapsky, 1889; Schuller, 1908; Uhle, 1922), solo existen vestigios del quechua y el aymara en esos sectores hoy (Darapsky, 1889; Uhle, 1922).

Por su parte, Fernández (2010), quien realiza un estudio diacrónico de las lenguas que se utilizaban en el norte grande, comprueba que el ckunza solo estuvo presente y activo durante el periodo prehispánico en el sector antes descrito por Lenhert. Asimismo, releva que durante el período de conquista y colonia, el ckunza se transformó en una lengua minoritaria, cediendo espacio a las lenguas aymara y quechua, traídas por los imperios Tiwanacu de Ayacucho e Inca de Cusco, respectivamente. Estos idiomas pasaron a ser intrumentalizados para la colonización y evangelización hasta que a fines del siglo XVIII, Carlos III ordenó el uso exclusivo del castellano para dichas tareas. Por tanto, el escenario adverso que enfrentó el ckunza no es accidental. Es el resultado de procesos intensos y sistemáticos de colonización y aculturación, cuya característica principal fue el dominio de un grupo sobre otro y la sustición de la lengua indígena minoritaria por la lengua dominante (el español). Esto suele ocurrir en situaciones de conflicto lingüístico y cultural, donde el grupo mayoritario se impone sobre el minoritario (pueblos originarios) (Brezinger, 2007).

El estudio de Fernández también demuestra que, debido a factores geográficos y climáticos, el ingreso del castellano fue más potente en los sectores costeros (2010, p. 132). En cambio, esto no ocurrió en las zonas altas de las montañas andinas, porque los colonizadores españoles, portadores de la variedad lingüística dominante y normativa, tuvieron dificultades geográficas para acceder a la zona cordillerana. Es por ello que hoy aún es posible observar vestigios del ckunza en la toponimia atacameña.

Lehnert (1987) también se embarca en la búsqueda de los rastros del ckunza, con el objetivo de delinear una cronología del uso de la lengua. En esta línea reporta que lo señalado por el capellán fray Juan de Cárdenas (Casassas, 1974, p. 51), los atacameños hablaban una lengua diferente al quechua y aymara. También nos informa que a mediados de siglo XVI, Cristóbal Díaz de los Santos, cura Español en San Pedro de Atacama, aprendió el ckunza y predicó a los atacameños en esa lengua (Le Paige, 1975, pp. 108-109). Además, se menciona que Phillipi (1860, p. 56), quien visitó la región atacameña durante el periodo 1853-1854, concluye que la lengua atacameña se habla en la región previamente mencionada y que esa lengua es diferente a las otras lenguas originarias habladas en la región. Finalmente, Mostny et al. (1954, p. 296), como parte de su investigación, graban canciones y conversaciones en lengua ckunza de las tribus atacameñas y además declaran que la lengua está extinta desde hace cerca de sesenta años.

En esa línea, San Román observa que:

[A]lgunos de los pocos indios cunzas que conservan restos de su antigua lengua, muy ancianos todos ellos y que no han transmitido su uso a la actual generación (…) la lengua atacameña va desapareciendo y perdiendose en el olvido, y tan pronto como hayan expirado los poquisimos octogenarios que aún conservan su uso (…) no quedará de ella [cunza] el menor vestigio. (1890, pp. 4-5)

Años más tarde, Vaïsse et al. reafirmaban lo anterior y señalan que “La lengua atacameña o kunza, ya pertenece a las lenguas estintas (sic)” (1896, p. 5). Finalmente, Mostny et al. concluyen que:

Durante una visita anterior (mayo 1949) un vecino nos informó, que había todavía gente de edad que habla el antiguo idioma de los atacameños, el cunza, el cual había sido considerado como extinguido desde más de medio siglo. Investigaciones más cuidadosas durante el último viaje demostraron, que con excepción de uno u otro viejo, ya no se habla el idioma con fluidez. Pero muchas personas, especialmente las de más edad, poseen todavía un más o menos extenso vocabulario en cunza (…) textos completos en cunza se usan todavía en algunos cantos ceremoniales (…) pero ya no existe nadie, por lo menos en Peine , que entienda los textos completos [Talatur]. (1954, p. 86)

Estos investigadores concluyen que el lenguaje ya está extinto y logran rescatar los últimos vocablos, oraciones y canciones que quedan. Eso es lo que llega hasta hoy y permite a los investigadores actuales reconstruir el contexto de la lengua y la lengua en si misma, con el objetivo de aportar a su revitalización.

En estos esfuerzos, los investigadores y observadores del ckunza han intentado infructuosamente clasificar la lengua ckunza dentro de las familias de las lenguas del mundo. Intelectuales tales como Vaïsse et al. (1896) y Polo (1901), respectivamente, hipotetizan que el ckunza es una lengua similar a los dialécticos polinésicos y que los atacameños llegaron desde Oceanía. Sin embargo, ninguno de ellos es capaz de entregar evidencias sólidas para apoyar sus argumentos. Asimismo, Tschudi (1869) exploró el vínculo del ckunza con la lengua diaguita llamada kakán. Tschudi (1869) menciona que aún cuando los restos puros del ckunza que se conservan provienen de los indios calchaquíes, la investigación arroja que no existe parentesco entre la lengua calchaquí y la familia de la lengua diaguita. Finalmente, Nardi (1979) publicó un glosario de la kakán. Este glosario sirvió de corpus para la comparación entre el kakán y el ckunza llevado a cabo por Lehnert (1987, p. 108). Él concluyó, luego del análisis, que no hay semejanza léxica entre ambas lenguas.

Por otro lado, previos ejemplos de revitalización lingüística, tales como el hebreo, establecen que se requieren ciertas condiciones para la revitalización exitosa de una lengua. Estas condiciones son exclusivas del contexto e historia de la comunidad hablante de la lengua. Es por ello que, en el caso del hebreo, solo esta lengua tenía las condiciones históricas, religiosas e ideológicas que contribuyeron a su revitalización. Otra condición crucial para la revitalización lingüística, que también estuvo presente en el hebreo, es la acumulación del conocimiento de la comunidad lingüística gracias al uso de la tradición literaria. Sin embargo, el griego clásico posee esta característica pero no ha sido suficiente para revitalizar la lengua (Lemus, 2012, p. 72). Por lo tanto, se requiere una comunidad de hablantes que usen y transmitan la lengua a las siguientes generaciones.

En este contexto, se problematiza la posible revitalización de la lengua ckunza de San Pedro de Atacama. De acuerdo a Mostny et al. (1954), Fernández (2010), San Román (1890) y Vaïsse et al. (1896), el ckunza es una lengua extinta, ya que sus últimos hablantes murieron en los noventa. Sin embargo, estudios realizados a lenguas extintas revelan que la tradición literaria contribuye a la revitalización lingüística. Por su parte, la característica fundamental de la tradición literaria es su composición, es decir, los elementos de la gramática de una lengua que son cruciales para la reconstitución de esta. Es por ello que este trabajo propone reconstruir los elementos de la gramática del ckunza con el objetivo de aportar a la revitalización de esta lengua. Después de contextualizar el estado de la lengua ckunza, se procede a explorar la composición del idioma.

Elementos de la gramática de una lengua

Las lenguas están compuestas por sonidos, significados y reglas que, al combinarlas, crean oraciones. De acuerdo a Fromkin y Rodman, “los elementos y las reglas constituyen la gramática de una lengua” (1983, p. 12). Esa gramática es lo que los hablantes conocen de su lengua de forma inconsciente y aplican al momento de crear oraciones para comunicarse con los otros. En la teoría lingüística, los elementos de la gramática son el léxico, la semántica, la fonética y fonología, la morfología y la sintáctica. En el caso de la lengua ckunza de los atacameños, el léxico fue recopilado por el trabajo de Vaïsse et al. (1896) en su diccionario llamado “El Glosario de la Lengua Atacameña”. La fonética y fonología fue inicialmente estudiada por Mostny et al. (1954) en el libro llamado “Peine: un pueblo atacameño’. Además, Lehnert (1987) y Gundermann (2014) han contribuido a la comprensión de la pronunciación de las vocales y consonantes del ckunza con sus correspondientes trabajos que recopilan estudios anteriores. La morfología y la sintáctica han sido exploradas por San Román (1890), Schuller (1908), Mostny et al. (1954) y Torrico-Ávila (2019). A continuación, se entrega un compendio de estos elementos del ckunza que proviene de la revisión de los estudios realizados por los pioneros en el campo.

Revisión de estudios previos de la fonética y fonología de la lengua ckunza

Como se mencionó anteriormente, el corpus seleccionado para el análisis de la construcción lingüística de la lengua ckunza proviene del glosario recopilado por Vaïsse et. al. (1896). Cabe destacar que este glosario está compuesto por algunos términos provenientes del trabajo de Phillipi (1860), Tschudi (1869), Moore (1878) y San Román (1890). Lehnert (1987, p. 108), quien reconoce que la lengua ckunza ha dejado de ser la forma de comunicación entre sus hablantes –quienes emplean hoy el castellano, pero que aún utilizan el ckunza en la toponimia, cantos ceremoniales, fitonimia, artesanía y otros campos semánticos–, advierte que, debido al periodo en que se realizó la recolección del corpus, entre 1850-1900, la lengua ckunza ya recibía influencias del quechua, castellano y aymara. Estas lenguas podrían haber tenido un impacto en el ckunza no solo en el aspecto morfológico, sino también en el fonético. Es así como la influencia de otras lenguas en el ckunza le da a la lengua características específicas, como detallan y describen varios investigadores:

Su idioma es áspero, abundante en sonidos guturales, debido tal vez a las montañas elevadas que hay en esas localidades. (Echeverría y Reyes, 1966, p. 90)

La lengua de los indígenas de Atacama es totalmente diferente al resto de las lenguas indígenas. Suena áspera y desagradable y abunda en sonidos guturales peculiar hicimos, casi imposible de imitar. Para transmitirlos correctamente debería emplearse una gran cantidad de signos especiales. (Tschudi, 1971, p. 17)

Tiene el cunza aspiraciones fortísimas seguidas de una notable prolongación de la vocal, lo que usan para ciertas voces imitativas de la naturaleza. (San Román, 1890, p. 15)

Una descripción detallada de la fonética del ckunza proviene del estudio de Lehnert (1987, p. 109-111), quien emplea el Glosario de Vaïsse et al. (1896) como corpus de estudio. Lehnert (1987, p. 111) reconoce diez sonidos vocálicos en la lengua atacameña, que son los siguientes:

  1. /a/: sonido similar al castellano en cualquier posición de la palabra. Ejs.: atan /atan/ ‘noche’ (G); lalama / lalama / ‘trueno’ (G)

  2. /a:/: sonido de mayor duración; en su casi totalidad ocurre en posición intermedia de la palabra y en bisílabos tónicos. Ejs.: haari /ha:ri/ ‘cuervo’ (G)

  3. /e/: sonido igual al Castellano: ocurre en posición intermedio y final de la palabra. Ejs.: leber /leber/ ‘plata’(G); lorckte /horckte/ ‘arena’(G)

  4. /e:/: sonido de mayor duración; ocurre en posición intermedia de palabra. Ej.: heelata /he:lata/ ‘mentira’(G)

  5. /i/: sonido igual al Castellano en cualquier posición de la palabra. Ejs.: inti /inti/ ‘tanto’ (G); lickan /likan/ ‘pueblo’. No obstante si /i/ va seguida de vocal tiende a separarse de esta. Ej.: ckenia /keni-a/ ‘diente’.

  6. /i:/: sonido de mayor duración, ocurre en posición intermedia de la palabra. Ej.: piimu /pi:mu/ ‘falda’ (G)

  7. /o/: sonido igual al Castellano; ocurre en posición intermedia y al final de la palabra. Ej.: ckoscko /kosco/ ‘lechuza’(G)

  8. /o:/: sonido de mayor duración; ocurre en posición inicial, intermedia y final de la palabra. Ejs.: toockor /to:kor/ ‘zanja’ (G); tchoo /tso:/ ‘testiculos’(G)

  9. /u/: sonido igual al castellano; ocurre en posición intermedia y final de la palabra. Ejs.: ckuta /kuta/ ‘sal’(G); tchalau /tsalau/ ‘pene’ (G)

  10. /u:/: sonido de mayor duración; ocurre en posición intermedia. Ejs.: Ckeuuy /keu:i/ ‘dientes’ (G).

En relación con las consonantes en ckunza, Gundermann (2014) rescata y categoriza los sonidos consonánticos apoyándose del “Glosario Atacameño” de Vaïsse et al. (1896) y del trabajo posterior realizado por Schumacher (1989), quien también utiliza la investigación de Vaïsse et al. (1896) para realizar su análisis. La fonética consonántica del ckunza propuesta por Gundermann (2014, pp. 53-55) se detalla a continuación:

  1. /m/ nasal, bilabial sonora; aparentemente similar a como en castellano; en kunsa en palabras como /mut’u/ = arriba, en Vaïsse et al. “muttu”; o /malxar/ = garganta, en Vaïsse et al. “lockma”; o /xumi/ = látigo, en Vaïsse et al. “ckumi’.

  2. /n/ nasal, alveolar, sonora, aparentemente similar a como en castellano; en kunsa en palabras como /kunsa/. También en posición inicial como en /nunir/ = pesado.

  3. /ñ/ nasal, palatal, no presente en el kunsa como fonema, y cuya escasa presencia en kunsa antiguo puede atribuirse a la influencia del castellano. Presente en dos vocablos: “bañucki” = tonto, “ckatitchauña” = imposible, “ckaimiñir” = podrido, o en “ckeleth-auña” = nunca (Vaïsse et al.).

  4. /b/ oclusiva, bilabial sonora; sería similar a como en castellano, con alófonos como la labio dental /v/ asociados a la posición. En el kunsa está presente en palabras como /beter/ = camino, también ayllo de San Pedro de Atacama. También en posición intermedia en palabras como /xabar/ = ropa, en Vaïsse et al. escrito “ckabar”.

  5. /d/ oclusiva, dental, sonora. No presente en el kunsa registrado por los autores más antiguos, salvo en unas pocas palabras con indudable influencia del castellano. Es el caso de “antap tarde” = esta tarde; “Huatacondo”, nombre de la localidad homónima; “ckedúdama” = duda; “backa-psladis” = sur; o “ladia”= oeste (Vaïsse et al.). Considerando esa presencia que, como se lleva dicho, es explicable por la importante influencia que a finales del siglo XIX se verificaba desde el castellano en el kunsa subsistente, se puede incluir el grafema correspondiente en el conjunto como uno entre otros que resulta necesario considerar debido a esa influencia.

  6. /g/ oclusiva velar sonora. No presente en el kunsa registrado por los autores que registraron algo de esta lengua a finales del siglo XIX, con la salvedad de una palabra de indudable influencia castellana como “negacka” = negar.

  7. /l/ lateral, dental o alveolar, similar a como en castellano; en kunsa en palabras como /lari/ = sangre, escrito en Vaïsse et al. como “laari”, lari” o “lay-ir”. También en posición intermedia en palabras como /bilti/ = halcón, o /xolxtur/ = caer (en Vaïsse et al. “Ckolcktur”).

  8. /p/ oclusiva bilabial sorda o áfona, similar a como en la palabra castellana /papa/; en kunsa en palabras como /papur/ = lana, en Vaïsse et al. “paapur”. También en posición intermedia en palabras como “p’uputur/ = soplar, en Vaïsse et al. “ppúputur”

  9. /p’/ oclusiva, bilabial sorda y eyectiva; sonido especifico del kunsa como en /p’alama/ = tres; presente también en otras lenguas andinas. En kunsa aparece en otras palabras como /p’alta/ = aplastado, chato; /p’iru/ = porongo o puruña, o /p’upuntur/ = soplar. Presente en posición inicial y media de palabras. Escrito con pp en Vaïsse et al. como en “ppuputur”.

  10. /s/ fricativa, ápico alveolar sorda o áfona, similar a como en castellano en la palabra: /sapo/; en kunsa en palabras como /kunsa/. También en posición inicial como en /solor/ = flamenco, o /sep’i/= nariz, en Vaïsse et al. como “sepi”.

  11. /t/ oclusiva, alveolar, áfona, similar a como en castellano; kunsa en palabras como /p’alta/ = aplastado. También en posición inicial en palabras como /tixne/ = codo, en Vaïsse et al. “ticne”.

  12. /t’/ oclusiva, alveolar, áfona y eyectiva; sonido específico del kunsa, presente en otras lenguas andinas; en kunsa en palabras como /t’alatur/ = baile ceremonial atacameño, en Vaïsse et al. “ttalatur”. También en posición intermedia en palabras como en /yot’o/ = barro, en Vaïsse et al. “yotto”.

  13. /c’/ (ocupando la grafía de la lingüística hispánica) africada, postdental, áfona y eyectiva; sonido especifico del kunsa, presente en otras lenguas andinas. En kunsa en palabras como /c’oxo/ = mariposa, en Vaïsse et al. “Tocko”. También en posición intermedia, como en /c’itc’ebala/ = murcielago, en Vaïsse et al. “tchitchebala”. En la grafía que hemos recibido, presente en palabras con las combinaciones gráficas ts, tz, tch, y ch.

  14. /c/ siguiendo a Schumacher (1989), no estaría presente en el kunsa el sonido /c/ (grafo de la lingüística hispánica): africada, alveo-palatal, sorda, sino la que se acabó de describir o /c’/eyectiva. En relación con vocablos actuales del kunsa, podría ser de utilidad considerar esta grafía y no la ch o ll. En previsión de que en el castellano actual de los atacameños están presentes palabras de indudable origen kunsa que incluyen /c/ (nuevamente usando por comodidad y economía la indudable grafía de la lingüística hispánica), pero de las cuales no se conoce cómo se expresaban antaño, conviene establecer este fono y su correspondiente grafema para su empleo en el presente.

  15. /x/ fricativa velar áfona, como en jama: /xama/; siguiendo el análisis de Schumacher es lo que Vaïsse escribiría en inicio de palabra como ck. En Vaïsse et al., en palabras como “ckabutur” = lavarse /xabatur/, “ckalal” = quebrada /xalal/ o “ckani” =vientre /xani/. También en posición intermedia, como en /xolxtur/ = caer, escrito en Vaïsse et al. “Cholcktur”.

  16. /k/ oclusiva o explosiva, velar, áfona. Aparentemente no presente como un fono característico en el kunsa del siglo XIX, o al menos con rango de fonema, si se atiende a lo indicado por Schumacher (1989:113). Al respecto, Sánchez (1998:173) subentendería esta ausencia, pero evita pronunciarse directa y abiertamente sobre el particular. En Vaïsse et al., aparece eventualmente en palabras tales como “itchicai” (pequeño, chico) o “lascar” (volcán en Toconao). Sin embargo, con posterioridad a Vaïsse et al., se han presentado durante el siglo XX dos fenómenos de importancia que aconsejan su incorporación a un grafemario del kunsa. Primero, que un número importante de palabras del kunsa siguen usándose coloquialmente en el castellano de los ahora monolingües atacameños y, entre ellas, muchas que ocupan /k/. Segundo, que recientemente los atacameños se han interesado por conocer lo que se escribió en su lengua y la han adoptado, por hábito propio e inducción externa, en el empleo de /k/ para reproducir o escribir palabras que Vaïsse et al. consignaron con /ck/. Entonces, en aras de ganar fidelidad lingüística, podría emplearse para el vocabulario antiguo lo que sería un sonido /x/ = fricativo, velar áfono y para el vocabulario nuevo, más los préstamos del castellano, la /k/ = oclusiva, velar, áfona.

  17. /h/ fricativo, oral, sordo laríngeo que estaba presente en palabras tales como /hari/ = condor, en Vaïsse et al. “haari”, o /hitan/ = nido o /hebir/ = piojo.

  18. /y/ fricativa, palatal sonora. Como en castellano de chile en la palabra “calle”. “Ayuda” o “suyo”. Este sonido corresponde en castellano a los grafemas ll o y. En kunsa en palabras como /yalir/ = mozo, joven, en Vaïsse et al. escrito “yaali”; /yankul/ = maiz, en Vaïsse et al. “yancul”; o /yoxto/ = sordo, en Vaïsse et al. “yockto”. Puede ser conveniente, por familiaridad con el castellano, emplear la grafía /y/, presente en la lingüística hispánica.

  19. /r/ vibrante simple, alveolar, sonora. Se trata de un fonema característico de fin de palabra componiendo una partícula de acción. Similar a como en castellano en palabras como /komer/. En kunsa está presente en palabras como /c’apur/ = zorro, en Vaïsse et al. “Tchapur”; o “c’exitur” =remojar, en Vaïsse et al. “Tcheckitur”. Más escasamente también se presenta en posición intermedia, como en “harixuntur”.

Estas recopilaciones (Lehnert, 1987; Gundermann, 2014) no solo proveen insumos fundamentales relacionados con los sonidos de la lengua amerindia, sino que también son aportes valiosos que podrían contribuir directamente con su revitalización. Esto es, debido a que aporta a los esfuerzos que realizan los diferentes actores de la comunidad de San Pedro de Atacama, tales como educadores tradicionales, representantes de los ayllus, dirigentes de CONADI y la Provincial de Educación de Calama y cultores locales para revivir la lengua de sus ancestros. Después de haber presentado los sonidos del ckunza, es pertinente explorar el léxico de esta lengua amerindia.

El léxico del ckunza

El elemento de la gramática conocido como léxico ha sido recopilado por varios autores y exploran diferentes ámbitos de la lengua ckunza (Álvarez, 1996; Lehnert, 1976; 1994; Sánchez, 1998; Segovia, 2012; Vaïsse et al., 1896; Vilte, 2004). Los primeros en recolectar las palabras ckunza fueron Vaïsse et al. (1896), en su trabajo denominado “Glosario de la Lengua Atacameña”. Este trabajo recupera las palabras recogidas en los cuadernos de campo de Emilio Vaïsse, Félix Hoyos y Aníbal Echeverría y Reyes. En él, describen el espacio geográfico ocupado por los hablantes de ckunza y advierten que la recuperación de la pronunciación del idioma es poco probable, ya que los naturales del idioma han sido poco precisos en ello. Finalmente, señalan que el estudio de la gramática del ckunza se encuentra en un estado embrionario, por lo que es necesario continuar abordándola, en pos de su reconstrucción y recuperación (Vaïsse et al., 1896).

Otro trabajo de rescate léxico fue realizado por Roberto Lehnert (1994), quien recopila las palabras en lengua ckunza que están relacionadas con el entorno natural en el que se desenvolvía este pueblo en el periodo pre-hispánico. Como él mismo explica, el diccionario se enfoca en:

[E]l estudio de los nombres geográficos, esto es, la toponimia, constituye una de las tantas áreas en que la lingüística aporta a los nuevos conocimientos acerca del hombre y sus relaciones con el entorno natural. (1994, p. 7)

Por otro lado, el trabajo realizado por Alejandro Álvarez (1996), que revisa los estudios previos de Vaïsse et al. (1896) y San Román (1890), apunta a ser un diccionario más práctico, cuyo objetivo es facilitar la búsqueda de las palabras. Es así que el trabajo está dividido en dos partes. La primera entrega la clasificación de las palabras del ckunza al español y la segunda del español al ckunza. Este trabajo rescata vocabulario general y también entrega una breve explicación de la pronunciación del ckunza, listas de adjetivos, números, pronombres, sustantivos, verbos, adverbios, colores y apellidos provenientes del ckunza.

Julio Vilte (2004), en colaboración con la empresa minera Codelco Chile, publica el “Diccionario Kunza-Español/Español-Kunza”, el cual proporciona una revisión del contexto en el cual el ckunza está inmerso. Introduce además información acerca de las dinámicas culturales y ceremoniales de la cultura Lickan Antai. El escritor puntualiza también que este sistema lingüístico pertenece a los ancestros y que, por ello deber ser rescatada. A la vez, esta contribución recopila imágenes propias de la cosmovisión andina. Esto es de especial relevancia, pues se plantea la necesidad de rescatar un patrimonio lingüístico y cultural fundamental para la identidad de los Lickan Antai de San Pedro de Atacama.

Wilson Segovia, cultor tradicional y sociólogo atacameño, participó en la investigación que culmina con la publicación del “Diccionario didáctico Kunsa”, financiado por el Departamento Andino de la Municipalidad de Calama en el año 2012. La característica fundamental de este diccionario es que posee imágenes y es visualmente más atractivo que las versiones anteriores. Mientras que el aporte de cada uno de estos diccionarios es claro, la diferencia principal está en el deletreo de las palabras. Mientras que Vaïsse et al. (1896) llama a la lengua “cunza”, Lehnert (1994) y Vilte (2004) optan por deletrear el idioma como “kunza”. Álvarez (1996) rescata la “ck” propia del ckunza y deletrea como “ckunza”. Segovia (2012) por su parte, prefiere llamar a la lengua “kunsa”. Finalmente, estos diccionarios cumplen con la función de entregar las palabras de la lengua ckunza. Estas palabras son los componentes básicos para la formación de oraciones y preguntas, las cuales permitirán codificar mensajes, que es el objetivo crucial de la comunicación significativa entre grupos humanos. Para ello, las palabras deben cumplir funciones dentro de la oración o la pregunta, y esa descripción se logra a través del estudio de la morfología del ckunza.

Análisis del corpus desde una perspectiva morfológica

Esta sección busca examinar las palabras en ckunza, para explicar la lógica detrás de su composición desde una perspectiva morfológica. El corpus para este estudio proviene del “Glosario de la Lengua Atacameña” (Vaïsse et al., 1896). Para ello, se exploraron la raíz de la palabra y los sufijos que la componen. Estos componentes permiten la formación de sustantivos y verbos, como se detalla en los extractos 2.3.1 y 2.3.2 (tabla 1 y 2):

Tabla 1.
Extracto 2.3.1
Extracto 2.3.1


Fuente: Torrico-Ávila (2018, p. 7)

El extracto 2.3.1 muestra la raíz de la palabra Ckepe o Ckepi, que en ckunza significa “ojo”. A esa raíz, que es la forma base de una palabra y que no puede ser dividida (Crystal, 1997, p. 336), se unen sufijos de dos tipos; los sufijos libres, que pueden aparecer en el texto sin depender de otra raíz, y los sufijos dependientes, que dependen de una raíz verbal para subsistir (Fromkin y Rodman 1983, p. 114). En el caso de Ckepininai, se observa la raíz más un sufijo libre que crea la palabra pupila. Ckepitarana . Ckepickati son ejemplos similares. Por otro lado, la raíz Ckepe/Ckepi puede además contener sufijos dependientes tales como -pui, -sinna y -ninar. Estos sufijos dependen de una raíz y no pueden aparecer de manera aislada en el texto. Finalmente, la formación de las palabras mencionadas previamente está compuesta por fonemas lexicales, ya que ellas contienen e informan el significado de las palabras en ckunza.

Tabla 2.
Extracto 2.3.2
Extracto 2.3.2


Fuente: Torrico-Ávila (2018, p. 8)

En el extracto 2.3.2, se puede observar que las raíces van acompañadas por el sufijo dependiente -tur. Este sufijo es un morfema gramatical, es decir, esta partícula otorga a la palabra características gramaticales, a diferencia de las lexicales como lo son el significado. La característica gramatical otorgada por el sufijo -tur es que transforma a las raíces heus-, Heel-, ckasan- y ckara- en verbos en forma infinitiva.

Tabla 3.
Extracto 2.3.3
Extracto 2.3.3


Fuente: Torrico-Ávila (2018, p. 8)

En el extracto 2.3.3 (tabla 3), se observa que la raíz de la palabra Heust- puede contener un sufijo dependiente gramatical como -tur, y transformar la palabra en un verbo infinitivo, o un sufijo dependiente lexical, y transformar la palabra en un sustantivo. Por otro lado, también se puede observar que la raíz puede contener dos sufijos dependientes, como en la palabra heustchatur. Por un lado, el significado de la palabra es compuesto, es decir, agotamiento por trabajar. Por otro lado, se observa que existe una organización para adjuntar sufijos a la raíz. De acuerdo a eso, puede verse que primero se integra el sufijo lexical -tcha y luego el sufijo gramatical -tur.

Tabla 4.
Extracto 2.3.4
Extracto 2.3.4


Fuente: Torrico-Ávila (2018, p. 9)

En el extracto 2.3.4 (tabla 4), la raíz de la palabra es Ckaabar. Esa raíz recibe un significado, el cual es ‘traje’ o ‘vestido’ en castellano; cuando la raíz toma sufijos tales como –tantur, la raíz adquiere otro significado, el cual es ‘vestirse’. Cabe destacar que el sufijo tiene un significado en sí mismo, el que traspasa a la raíz. En este caso es ‘ponerse’.

Tabla 5.
Extracto 2.3.5.
Extracto 2.3.5.


Fuente: Torrico-Ávila (2018, p. 9)

En el extracto 2.3.5 (tabla 5), se tiene la raíz Lacksi, que significa ‘cabeza’. A la vez, se tiene la raíz Tchatur, que significa ‘dolor’ en castellano. Cuando se unen ambos, se obtiene la palabra ckunza Lackchatur, cuyo significado en castellano es ‘jaqueca’. Ambas, una funcionando como raíz y el otro como el sufijo de la raíz, dan como resultado un significado nuevo.

En relación con las lenguas aglutinantes, que de acuerdo a Crystal (1997, p. 13) son “palabras que típicamente contienen una secuencia lineal de morfemas”, esto se refiere a los morfemas que componen una palabra. Un morfema es la unidad funcional mínima en la composición de las palabras (Crystal, 1997, p. 248). Una palabra en una lengua aglutinante contiene una raíz y al menos un morfema, ambos con significados definidos. Los morfemas o sufijos que se unen a la raíz pueden contener información de número, genero, caso o léxico que aportan a la formación de la nueva palabra. Por ejemplo, en los extractos citados arriba, se tienen las palabras ckepitarana, heustchatur, ckaabartantur y lacktchatur. Aquí se encuentra con raíces en lengua ckunza que han tomado al menos un sufijo, los cuales cumplen con funciones léxicas. Es decir, los sufijos han expandido el significado de los sustantivos a los que acompañan y en algunos casos transformando el sustantivo en verbo. Ahora bien, antes de continuar, es necesario enfatizar que esta sección solo presenta y describe elementos de la morfología derivacional porque esto es lo que se encuentra disponible en los estudios de la lengua ckunza. En otras palabras, en la bibliografía especializada no existen registros de la morfología flexiva, lo que limita la presentación de estos elementos.

Análisis sintáctico de la lengua ckunza

A continuación, se presentan los primeros estudios de la sintáctica de la lengua amerindia realizados por los pioneros en la investigación del ckunza. Ellos son Vaïsse et al. (1896), San Román (1890), Mostny et al. (1954), Lenhert y Bustos (2005) y Torrico-Ávila (2019). De los limitados datos recopilados en los antiguos escritos relacionados con la lengua, Torrico-Ávila (2019) ha podido rescatar el orden de las palabras en la oración de la lengua ckunza. Esta se construye de la siguiente forma: Sujeto (S) + Objeto (O) + Verbo (V). Así lo muestra Lehnert y Bustos (2005, p. 8) en el extracto entregado abajo:

Extracto 2.4.1

Pauna tchusli colama

(S) (O) (V)

El niño papa almuerza (en castellano)

En el extracto 2.4.1 se observa el orden de las palabras, es decir (S)+(O)+(V), de la misma forma como se rescata en el trabajo de San Román (1890, p. 18) y Lehnert y Bustos (2005, p. 8). Además, el uso del sufijo dependiente –ma para expresar tiempo presente, y de esa forma reemplazar el sufijo dependiente –tur que simboliza el verbo infinitivo, ha sido usado anteriormente por San Román (1890, p. 18) y por Mostny et al. (1954, p. 143). Otra evidencia recogida por Lehnert y Bustos (2005, p. 18), en la que rescataron el orden de las palabras en ckunza, se muestra a continuación:

Extracto 2.4.2

(S) + (O) + (V)

Aca puri haitama

Yo agua bebo (en castellano)

Silacota puri haitama

Las llamas agua beben (en castellano)

Este extracto no solo informa sobre el orden de las palabras en ckunza, sino también sobre la inflexión del verbo haitatur. En él, se observa que la partícula –tur representa a la forma infinitiva del verbo, es decir, “beber”. El sufijo –ma, que ha sido adjuntado a la raíz del verbo “beber”, es la partícula que informa del tiempo presente.

San Román (1890, p. 18) también entrega el orden de los adjetivos en la lengua ckunza. En su investigación, él recoge el siguiente extracto:

Extracto 2.4.3

(S) + (ADJ)

Pauna válchar

Niño malo (en castellano)

En términos de tiempos verbales, San Román sentencia claramente que “[p]arece que los tiempos verbales [en el ckunza] se reducen sólo á tres: presente, pasado y turo.ju [sic]” (1890, p. 14). Es decir, dentro de las muestras lingüísticas que estaban disponibles al momento de la recolección que realizó este investigador, la lengua ckunza solo presentaba tres tiempos verbales. Ellos son presente, pasado y futuro. Sin embargo, no se puede aseverar que la lengua ckunza no poseía formas verbales más complejas cuando era una lengua viva y usada por sus hablantes en el pasado. Es así como en el extracto 2.4.1 se informa que el sufijo –tur contiene la información del verbo en infinitivo y que la partícula –ma representa al tiempo presente en la inflexión del verbo. Esto es reportado por Mostny et al. a continuación: “(…) con la terminación –ma de lo que Schuller llama el ‘presente’ y que nosotros consideramos como un elemento de la acción presente en espacio y tiempo” (1954, p. 143).

Por otro lado, el tiempo pasado también fue reconocido por Mostny et al. (1954:153) de la siguiente forma: “(…) C ) -na (…) indica la acción que no se encuentra presente en tiempo o espacio en el momento de hablar y la cual puede ser tanto pasada como futura. San Román y Schuller la llaman como el ‘pasado’”. Evidencia de esta aseveración proviene de San Román (1890:16), en el extracto de abajo:

Extracto 2.4.4

(S) + (O) + (V)

Chema ---------- se yócona

Tú -------------- has hablado (en castellano)

El extracto de arriba presenta la traducción literal entregada por el autor. Sin embargo, más adelante se detallarán los tiempos “ser/ estar” y “haber/tener” en la lengua ckunza, que también llegan a la actualidad, gracias a la investigación de San Román (1890). Es por ello que se concluye que el extracto 2.4.4 es tiempo pasado que debería traducirse como ‘tú hablaste’ en castellano. Otro extracto del tiempo pasado se detalla a continuación:

Extracto 2.4.5

(S) (O) (V)

Pauna tchusli colana

Niño papa almorzó (en castellano)

Es decir, la palabra ckunza colatur significa “almorzar” y morfológicamente es un verbo en su forma infinitiva, ya que el sufijo –tur está adherido a la base de la palabra. Colama significa “almorzar” en el tiempo presente, que es informado por el sufijo –ma (Mostny et. al., 1954, p. 156). Mientras que el tiempo pasado es informado por el sufijo –na en colana. En consecuencia, el tiempo verbal en ckunza es informado por el sufijo que se adhiere a la raíz del verbo. El sufijo dependiente –na, para expresar el tiempo pasado, también ha sido usado por San Román (1890, p. 16), Schuller (1908, p. 26) y Mostny et al. (1954, p. 152).

En relación al tiempo futuro, mientras que Mostny et al. (1954, p. 144) piensan que es simplista reducir a la lengua ckunza a tres tiempos verbales como presente, pasado y futuro, San Román (1890, p. 17) y Schuller (1908, p. 26), por el contrario, dan cuenta del tiempo futuro en sus correspondientes estudios. Para San Román y Schuller, la afirmación en el tiempo futuro es la siguiente:

Extracto 2.4.6

(S) (V)

Acca q’ yóconolo

Yo hablaré (en castellano)

En esta estructura, el sufijo dependiente –olo representa el tiempo futuro y es insertada en la raíz del verbo “hablar”, que en ckunza es yockontur (Vaïsse et. al., 1896, p. 35). Además, se reconoce el uso de “.” después del sujeto. Ambos autores, San Román y Schuller lo usan, pero ninguno elabora en su función o significado. Se observa también que San Román y Schuller no utilizan “ck” en el deletreo de las palabras en ckunza.

La negación en tiempo futuro también fue reportada por San Román (1890, p. 17). De acuerdo al investigador, el sufijo independiente –haus es la representación de la negación en lengua ckunza. Evidencia de eso puede observarse en el siguiente extracto:

Extracto 2.4.7

Chema se ---- yóconolo-haus

Tú ------- hablarás no (en castellano)

Además de los aportes en los tiempos presente, pasado y futuro, San Román (1890, p. 15) entrega luces de cómo se construyen los auxiliares “ser/estar” y “haber/tener” en la lengua amerindia. Los extractos 2.4.8 y 2.4.9, respectivamente, dan cuenta de las observaciones del investigador:

Extracto 2.4.8

Acca ya yo soy (en castellano)

Chema ya tú eres (en castellano)

ia ya él es (en castellano)

Cima ya nosotros somos (en castellano)

icota ya ellos son (en castellano)

Extracto 2.4.9

Acca ttanzi yo he o yo tengo (en castellano)

Chema ttanzi tú has o tú tienes (en castellano)

ia ttanzi él ha o él tiene (en castellano)

Cuna ttanzi nosotros tenemos (en castellano)

icot ttanzi ellos tienen (en castellano)

En los extractos 2.4.8 y 2.4.9 se puede observar que las palabras “ya” y “ttanzi” son morfemas que contienen información verbal. Ellas, además, informan que son auxiliares que no cambian de acuerdo a género y numero. Al contrario, “ya” y “ttanzi” permanecen igual para todas las personas y géneros.

Discusión

La investigación previa en el ámbito de la revitalización lingüística informa que las lenguas que han practicado la tradición literaria han logrado mantener registros de estas. Estos registros son piezas clave, ya que contienen las reglas de una lengua y que al ser utilizadas por los actores indicados, tales como lingüistas o educadores, es posible lograr la planificación e implementación requeridas para la revitalización lingüística. Sin embargo, la tradición escrita no es el único elemento necesario para lograr la revitalización. Hay otros factores fundamentales, tales como la existencia de comunidades lingüísticas que usen la lengua y que la traspasen a las futuras generaciones (Lemus, 2012).

Específicamente, el ckunza, una lengua declarada extinta, carece de tradición escrita y de comunidad de hablantes. Sin embargo, aun cuando este sistema lingüístico no tiene hablantes, aún es posible encontrar personas de la comunidad atacameña que se sienten con el deber y la necesidad de rescatar la lengua. Expresan que, junto con múltiples dinámicas socioculturales que los definen identitariamente, la lengua también es un elemento importante. Por tanto, realizan sistemáticos esfuerzos por revitalizarla (Torrico-Ávila, 2017). Esto es de especial importancia si se considera que este tipo de acciones, que emergen desde la misma comunidad atacameña, son fundamentales para la recuperación de lenguas extintas (Fishman, 1989).

En esta línea, el presente artículo ha contribuido en la reconstrucción de los elementos de la gramática del ckunza, que proveen los lineamientos estructurales para rescatar la lengua de manera escrita y oral. Con ello, es posible que futuros lingüistas, profesores y autoridades puedan realizar proyectos de revitalización lingüística planificada de mayor escala. Por ejemplo, lograr introducir la lengua atacameña a los planes y programas educativos del Ministerio de Educación chileno junto al aymara, quechua, mapuzungun y rapa nui.

El corpus de estudio que ha permitido esta recopilación proviene del trabajo realizado por estudiosos tales como Vaïsse et al. (1896), San Román (1890), Mostny et al. (1954) y Schuller (1908). Ellos, quienes tuvieron contacto con los últimos hablantes del ckunza, plasmaron en sus escritos y grabaciones oraciones relacionadas con rituales, ceremonias y cantos. Esas recopilaciones contienen los elementos de la gramática del ckunza. De ellos, son específicamente la sintaxis y la fonética las que logran recuperar las reglas del ckunza que llegan a la actualidad.

Las implicaciones de esta recopilación lingüística son variadas. Primero, se sugiere la observación del corpus empleado en este artículo con el objetivo de explorar la conjugación de los verbos en ckunza, ya que las muestras recolectadas solo utilizan un número menor de ellos. Este análisis permitiría reconocer patrones lingüísticos en términos fonéticos y léxicos que determinarían, por ejemplo, el uso de una consonante o vocal después de la raíz de un verbo. Segundo, aún cuando este estudio ha logrado reconstruir los tiempos verbales del ckunza, no se ha entregado la construcción de las preguntas en la lengua originaria. Tercero, las futuras investigaciones en el área podrían explorar una perspectiva comunicativa del uso de la lengua. Gracias a que algunas reglas de la lengua se entregan aquí, se sugiere la creación de material didáctico dirigido a los educadores tradicionales, quienes buscan enseñar el ckunza desde una perspectiva significativa alejada de la traducción y gramática repetitiva. Cuarto, las reglas para hablar y escribir en ckunza, además de la promoción de comunicación significativa, es solo el comienzo; cabe destacar que la formación de una comunidad de hablantes de ckunza sería un elemento crucial para su revitalización. Ese es el desafío que se deja a los futuros estudiosos de esta lengua. Quinto, la construcción del futuro en ckunza presenta partículas aún sin explicar, al igual que el orden de las palabras al usar las estructuras “ser/estar” y “haber/tener”. El corpus recolectado por los investigadores aquí citados no entrega mayor información acerca de ello. Finalmente, se sugiere el estudio de la semántica y pragmática del ckunza. Ellos también son componentes de los elementos de la gramática de las lenguas que no han sido explorados por este estudio. En conclusión, aún hay mucho por hacer y es de esperarse que este trabajo haya logrado iluminar la dirección que podría tomar la futura investigación.

Conclusión

El presente artículo ha tenido el objetivo de explorar los elementos que componen la gramática de la lengua ckunza. Para ello, se ha dividido este trabajo en varias etapas que se detallan a continuación: Primero, informar acerca del estado del arte en relación al conocimiento del léxico, fonética y fonología de la lengua ckunza. Segundo, realizar un análisis de la morfología de la lengua pre-existente. Tercero, dar muestras de la condición de lengua aglutinante del ckunza. Finalmente, observar la sintáctica de la lengua amerindia realizada por los pioneros en el estudio del ckunza. En consecuencia, esta recopilación ha sido conseguida gracias a los trabajos previos realizados por Vaïsse et al. (1896), San Román (1890), Schuller (1908), Mostny et al. (1954), Lehnert (1987) y Gundermann (2014).

Por otro lado, las limitaciones del presente trabajo están relacionadas con todos los elementos que componen la gramática de una lengua. Mientras que aquí se elaboró en el léxico, la semántica, la fonética, fonología, morfología y sintáctica del ckunza, aún no hay estudios acabados en relación sintáctica ni pragmática de la lengua. Eso es exactamente lo que sugerimos a los futuros investigadores en el área, explorar los elementos de la lengua que no han sido visitados a cabalidad en el pasado. Para concluir, la contribución que este artículo realiza desde una perspectiva macro, es cooperar con el proyecto de revitalización de la lengua de San Pedro de Atacama. Desde una perspectiva micro, el artículo colabora con la observación lingüística de la lengua amerindia.

Referencias

Álvarez, A. (1996). Diccionario Ckunza-Español. Español-Ckunza. Ediciones Odisea.

Brezinger, M. (2017). Language diversity endangered. De Gruyter.

Casassas, J. (1974). La Región Atacameña en el Siglo XVIII. Editorial Universitaria.

Crystal, D. (1997). A dictionary of linguistics and phonetics. Blackwell.

Darapsky, L. (1889). Estudios lingüísticos americanos. BIGA, 12, 368-380. http://www.bibvirtual.ucb.edu.bo:8000/etnias/digital/106001660.pdf

d’Orbigni, A. (1839). L’homme Américain (de la Ameriqué méridionale) considéré sous ses rapports physiologiques et moraux. Pitois-Levrault.

Echeverria y Reyes, A. (1966). La lengua atacameña. Ancora Revista de Cultura Universitaria, 3, 89-100.

Fernández, V. (2010). Lenguas en el norte grande de Chile: antecedentes históricos y situación actual. Tinkuy, 12, 121-142.

Fishman, J. A. (1989). Language and ethnicity in minority sociolinguistic perspective. Multilingual Matters.

Fromkin, V., y Rodman, R. (1983). An introduction to language. Holt-Saunders International Editions.

García, M. P. (2005). Estructuras gramaticales en el Glosario de la Lengua Atacameña (1896). Liames: Línguas Indígenas Americanas, 5(1), 25-42. https://doi.org/10.20396/liames.v5i1.1437

Gundermann, H. (2014). Guía para Educadores Tradicionales Cultura Licanantai y Lengua Kunsa: Programa de Educación Intercultural Bilingüe. Ministerio de Educación.

Lehnert, R. (1976). La lengua kunza y sus textos. Cuadernos de Filología, 5, 71-80.

Lehnert, R. (1987). En torno a la Lengua Kunza. Language Sciences, 9(1), 103-112. https://doi.org/10.1016/S0388-0001(87)80012-8

Lehnert, R. (1994). Diccionario Toponimia Kunza. Instituto de Investigaciones Antropológicas.

Lehnert, R., y Bustos, A. (2005). Licana: Texto de Lengua y Cultura Atacameña NB2. Universidad de Antofagasta/Fundación Minera Escondida.

Lemus, J. (2012). The resuscitation of Hebrew and its implications for language revitalization. Científica, 1, 71-82.

Le Paige, G. (1975). Noticias. Estudios Atacameños, 3, 107-109. https://doi.org/10.22199/S07181043.1975.0003.00013

Moore, T. H. (1878). Vocabulario de la lengua atacameña. Segundo Congreso Internacional de Americanistas, Tomo II (pp. 44-54).

Mostny, G., Jeldes, F., Gonzalez, R., y Oberhauser, F. (1954). Peine, Un Pueblo Atacameño. Instituto de Geografía.

Nardi, R. (1979). El Kakán, lengua de los Diaguitas. Sapiens, 3. http://www.adilq.com.ar/Nardi_Ricardo-El%20kakan_lengua_de_los_diaguitas.pdf

Phillipi, R. (1860). Viage al Desierto de Atacama hecho de orden del Gobierno de Chile en el Verano 1853-1854. E Anton.

Polo, J. (1901). Los Indios Urus del Perú y Bolivia. Imprenta y Librería de San Pedro.

Sánchez, G. (1998). Multilingüismo en el área de San Pedro de Atacama. Lenguas atestiguadas por la fitonomía del área de San Pedro de Atacama. Estudios Atacameños, (16), 171-179. https://doi.org/10.22199/S07181043.1998.0016.00004

San Román, F. (1890). La lengua Cunza de los naturales de Atacama. Imprenta Gutenberg.

Schuller, R. (1908). Estudio de la Lengua de los Indios Lican Antai (Atacameños)-Calchaqui. Imprenta Cervantes.

Schumacher, W. (1989). Reconstrucción interna del Kunsa. Revista Chungará, 22, 113-115.

Segovia, W. (2012). Diccionario didáctico Kunsa. Departamento Andino de la Municipalidad de Calama.

Torrico-Ávila, E. (2017). Taller de Sensibilización para el Rescate de la Lengua Kunza. Corporación Nacional de Desarrollo Indígena.

Torrico-Ávila, E. (2018). Fundamentación teórica del CKunza: Una breve observación a los elementos de la gramática de la lengua Kunza de San Pedro de Atacama. Consejo Lingüístico de la Lengua Ckunza.

Torrico-Ávila, E. (2019). “Perspectiva lingüística de la lengua Kunza del Pueblo Likan Antai de San Pedro de Atacama”. Presentación para Curso de Lengua y Cultura Ckunza, Universidad Arturo Prat-Calama.

Tschudi, J. J. von. (1971). Viajes a Sudamérica. Tomo V. Brockhaus [1869].

Uhle, M. (1922). Fundamentos Étnicos y Arqueología de Arica y Tacna. Imprenta de la Universidad Central.

Vaïsse, E., Hoyos, F., y Echeverría, A. (1896). Glosario de la lengua atacameña. Imprenta Cervantes. https://doi.org/10.5479/sil.266970.39088004560454

Vilte, J. (2004). Diccionario Ckunza-Español. Español-Ckunza: Lengua del pueblo Lickan Antai o Atacameño. Ograma S.A.

Notas

* Artículo de investigación.

Notas de autor

a Autora de correspondencia. Correo electrónico: elizabeth.torrico@uda.cl

Información adicional

Cómo citar este artículo: Torrico-Ávila, E. (2022). Los elementos de la gramática de la lengua ckunza de San Pedro de Atacama. Signo y Pensamiento, 41. https://doi.org/10.11144/Javeriana.syp41.eglc

Contexto
Descargar
Todas