Las bebidas azucaradas, también llamadas bebidas endulzadas con azúcar (
Actualmente, el consumo de SSB se considera uno de los principales problemas de salud pública no solo en Colombia, sino en el resto del mundo, por la relación que se ha observado entre el consumo de SSB, la presencia de obesidad y las enfermedades crónicas no transmisibles. Dentro del sistema de clasificación de alimentos NOVA, este grupo de bebidas se categoriza como alimentos ultraprocesados, cuya formulación industrial contiene cinco o más ingredientes, comúnmente adicionando azúcar simple, grasa saturada, sal, antioxidantes, estabilizantes y preservativos (
El consumo de SSB ha contribuido al desarrollo de un entorno obesogénico (
Para comprender mejor la raíz del problema se debe partir del estudio de los determinantes, es decir, de las características del contexto en que el ser humano crece y se desarrolla y que condicionan sus actitudes y, por ende, la toma de decisiones (
Los hallazgos servirán como una base teórica sólida para caracterizar el consumo de SSB en diferentes niveles de alcance, desde el contexto internacional, latinoamericano, nacional y local hasta los centros académicos como la Pontificia Universidad Javeriana (PUJ), lo cual permitirá construir estrategias de intervención educativas, que puedan reproducirse en diferentes contextos.
Las preguntas de investigación planteadas para esta revisión de enfoque fueron: ¿cuáles son los determinantes que influyen en el consumo de las SSB? ¿Cuáles intervenciones se han diseñado e implementado para la reducción del consumo de SSB? Hecho esto, se procedió a definir las palabras clave de búsqueda (
La búsqueda de los artículos científicos se realizó para el periodo 2010-2021, y para ello se emplearon nueve bases de datos: EBSCOhost, Pubmed, SciELO, LIPECS, IBECS, Science Direct, Web of Science, Scopus y Google Scholar. También se buscó en el repositorio institucional de la PUJ y de otras instituciones de educación superior públicas y privadas. Para la creación de ecuaciones de búsqueda se usaron las palabras clave y operadores booleanos, tal como se relacionan a continuación:
(students OR adolescents OR teenagers) AND (soda OR “sweetened beverage” OR “sugary drinks” OR SSBs OR SSB) AND (intake OR frequency OR consumption OR influency) (students OR adolescents OR teenagers) AND (soda OR “sweetened beverage” OR “sugary drinks” OR SSBs OR SSB) AND (intake OR frequency OR consumption OR influency) NOT (food OR sickness OR kids) AND (“Colombia” OR “Latin America” OR “Bogotá”) (students OR adolescents OR teenagers OR adolescentes OR universitarios OR estudiantes) AND (soda OR “sweetened beverage” OR “sugary drinks” OR SSBs OR SSB OR “bebidas azucaradas” OR gaseosas) AND (intake OR frequency OR consumption OR influency OR consumo OR frecuencia OR factores OR ingesta)
La información obtenida en la búsqueda fue organizada en una matriz en Excel, donde se registró la información general de los resúmenes. Posteriormente, para seleccionar los artículos se leyeron los resúmenes con base en la metodología de semaforización, en la cual se empleó el verde para los artículos que cumplieron con los criterios de inclusión; amarillo, para los que cumplieron con los criterios de inclusión y que posiblemente se relacionan con el objeto de estudio, y rojo, para los artículos que no cumplieron con los criterios de inclusión ni se relacionaron con el objeto de estudio.
Seguidamente, se utilizaron cuatro niveles de análisis por ámbito geográfico (internacional, Latinoamérica, Colombia, Bogotá o institucional), que incluyeron cuatro categorías de determinantes (sociodemográficos, conductuales, ambientales y cognitivos) y una categoría de análisis independiente de intervenciones. La matriz de artículos incluía la siguiente información: revista, factor de impacto, año de publicación, título del artículo, idioma, autores, filiación de los autores, objetivo, palabras clave, metodología, resultados y conclusiones.
El total de artículos recolectados fueron 87, de los cuales 80 se incluyeron en el estudio (
Como se observa en la
Por otro lado, el total de los artículos se clasificaron de acuerdo con el factor de impacto de las revistas y, a partir de estos resultados, fue posible observar que el 41 % de los artículos fueron tomados de revistas con un factor de impacto Q1. Los estudios que se encuentran en la categoría de “Otros” y que representan el 18 % de la bibliografía, corresponden principalmente a trabajos académicos realizados, en su mayoría en los ámbitos distrital (Bogotá) e institucional (PUJ).
A continuación, se presentan los resultados obtenidos de la revisión de los artículos científicos, en cuanto a las cuatro categorías de determinantes incluidas: sociodemográficas, cognitivas y psicológicas, del entorno, así como conductuales y ambientales, y respecto a la categoría de análisis de las intervenciones, para cada uno de los niveles definidos como internacional, Latinoamérica, nacional y local (Bogotá e institucional).
En el ámbito internacional, los determinantes más frecuentemente asociados con las SSB fueron aquellos de carácter sociodemográfico. En una muestra de 3926 individuos mayores de 18 años en Estados Unidos (EUA) se observó que quienes tenían ingresos inferiores a 34.999 dólares por año, con edades comprendidas entre 18 y 24 años, sexo masculino y con nivel educativo inferior a la secundaria, tenían mayor probabilidad de consumir SSB ≥ 2 veces al día (
La etnia, los factores culturales y la ubicación geográfica desempeñan, igualmente, un papel importante en la frecuencia de consumo de SSB. En una muestra poblacional de Nueva Caledonia, aquellos con residencia rural tenían mayor consumo de SSB (
En los estudios en Latinoamérica, con relación al grupo etario, se encontró que el mayor consumo de SSB se observó en el rango de edad de 15 a 39 años; mientras que por género, los hombres fueron quienes más tomaron estas bebidas (
En Colombia se ha observado una relación entre las condiciones de vida e ingresos, la residencia urbana y la etnia con el consumo de SSB. El Sistema de Selección de Beneficiarios para Programas Sociales (Sisbén), hoy en día denominado
Algunos aspectos adicionales que reflejan la influencia de los ingresos económicos son los factores que determinan la decisión de compra y consumo de este tipo de bebidas. En el ámbito local, se halló que para el 45 % de la población estudiada en una investigación de la Universidad Distrital de Bogotá el precio resultaba ser un factor clasificado como “muy importante” a la hora de adquirir las SSB (
Actualmente, el número de estudios que buscan analizar cómo el conocimiento que las personas tienen sobre el impacto de las SSB en la salud puede influenciar su consumo, se encuentra en aumento. De acuerdo con el estudio desarrollado por Park et al. (
En cuanto a los factores psicológicos, algunos estudios internacionales han mostrado que existe una relación entre la percepción de exceso de peso y el consumo de SSB. Así pues, se ha mostrado que la percepción de sobrepeso en los adultos se relaciona con el consumo de una dieta poco saludable, con exceso de gaseosas y jugos de fruta industrializados (
Adicionalmente, algunos autores han mostrado el efecto que tiene el estrés académico y los problemas emocionales sobre la alta ingesta de SSB (
Los comportamientos de los seres humanos están dados en gran medida por el contexto que los rodea; por tal motivo, se hace prioritario el estudio de los determinantes del entorno para el consumo de SSB. Algunos ejemplos observados en esta revisión en población adolescente fueron la elección alimentaria aprendida en la infancia, la disponibilidad de alimentos de alta densidad calórica, la presencia de un padre que habitúe el consumo de tabaco o SSB y madre con edad avanzada; todos estos, asociados directamente con el consumo de SSB (
Con relación a la población adulta, se pudo observar en una muestra de ocho pequeños y medianos centros de trabajo en EUA que aquellos considerados los “más saludables” por sus instalaciones y el mayor consumo de agua y menor consumo de SSB entre sus empleados tenían mayor tendencia a contar con políticas de control de peso (
En Bogotá, al igual que en el caso del contexto latinoamericano, se encontró que los patrones familiares son un factor “muy importante” en el momento de comprar estos productos industrializados, con una prevalencia del 26 % (
El entorno académico o laboral es igualmente crítico en el comportamiento asociado al consumo de SSB. En una investigación realizada en una institución de educación superior en Bogotá se encontró que los estudiantes de la carrera de Ciencias Políticas y Jurídicas fueron los que reportaron un mayor consumo de SSB (>20 %) y que el menor consumo se dio en estudiantes de Enfermería (<15 %) (
Hallazgos similares se presentaron en la PUJ, sede Bogotá, donde los determinantes para el consumo de SSB se resumen en el programa académico, el semestre y las motivaciones de consumo. En primer lugar, los estudiantes pertenecientes a las carreras de Ingeniería Civil e Ingeniería Industrial reportaron tener el mayor consumo mensual de SSB, especialmente de bebidas energizantes en los últimos seis meses. Con relación al semestre, los individuos que cursan tercero tuvieron la mayor ingesta de bebidas energizantes, seguido por primero, séptimo y noveno. Finalmente, en cuanto a las motivaciones de compra, se pudo evidenciar que esta decisión estaba condicionada mayoritariamente por el sabor, el precio y las recomendaciones de otras personas, adicional al objetivo intrínseco, en algunos casos, de mantenerse despierto y conservar la energía. Este último aspecto se puede asociar con el 55 % de los estudiantes que reportan consumo de bebidas energizantes mientras estudia, en la mayoría de los casos, durante la noche (
En el contexto internacional, algunas conductas relacionadas con estilos de vida poco saludables se han asociado con un mayor consumo de SSB. En el caso de niños y adolescentes, se relaciona específicamente con un alto consumo de tabaco y alcohol, una ingesta insuficiente de frutas y verduras, una frecuencia esporádica del consumo del desayuno (≤2 veces/semana) y una exposición al televisor ≥5 horas diarias (
Ahora bien, la investigación actual en Latinoamérica sostiene que el consumo de SSB no se encuentra aislado del patrón de hábitos saludables regular de las personas. Los resultados demostraron que el consumo de este tipo de productos se encuentra directamente relacionado con un consumo frecuente de golosinas, una dieta baja en lácteos y limitada realización de actividad física. De igual manera, se encontró que en el grupo etario de los adolescentes, los que provenían de familias de ingresos bajos y no realizaban ninguna actividad física presentaban una prevalencia de ingesta de SSB del 31,88 %; mientras que de los adolescentes de familias de ingresos altos que realizaban actividad física frecuente, esta prevalencia era de solo el 13,66 % (
Por otro lado, el estudio mexicano de Théodore et al. (
Partiendo de que las SSB tienen una contribución cerca del 23 % de la ingesta calórica total de comunidades con bajos ingresos económicos, en esta revisión se caracterizaron las estrategias regulatorias que se han adoptado en Latinoamérica para reducir el consumo de SSB. Un estudio realizado en el 2018 identificó que desde el 2006, 14 países de esta región han adoptado, al menos, 39 iniciativas reguladoras de SSB públicas y privadas en el marco de NUTRE, cuyas siglas se traducen en 5 ámbitos: relacionadas con restricciones publicitarias en entornos escolares (N), impuestos o subsidios (U), trabas en la publicidad dirigida a niños (T), regulación de la contratación pública (R) o etiquetado frontal (E). De estas, el 56 % contiene métodos explícitos de seguimiento, el 62 % prevé sanciones y el 28 % representa compromisos de autorregulación de las industrias de bebidas (
Uno de los principales obstáculos para el desarrollo de normativas que reduzcan la adquisición y consumo de SSB en los países de Latinoamérica es la presencia de grandes corporaciones transnacionales. Lo anterior, es especialmente evidente en países como México, Chile y Colombia, donde hay una oposición constante de la industria por la adopción de medidas regulatorias relacionadas con la compra y el consumo de SSB (
A pesar de lo anterior, en numerosos casos las propuestas sugeridas para imponer impuestos a las SSB, como la presentada en el 2016, han sido rechazadas y, en su lugar, compañías productoras de estas se comprometieron a una “autorregulación responsable”, lo cual implicaba mayor precaución en la divulgación del material publicitario y una promesa de ofrecer bebidas con menor contenido calórico y de menor tamaño. Los impactos de dicho acuerdo y las medidas subsecuentes fueron estudiadas por Lowery et al. (
Otra estrategia empleada para combatir este consumo excesivo de calorías vacías provenientes de las SSB es el uso de advertencias en el sistema de rotulado frontal. Uno de los mayores referentes actuales es la normativa chilena de etiquetado y comercialización, la cual logró, tras su implementación, la reducción del 23,7 % en las compras de SSB en comparación con lo que se hubiera esperado según las tendencias previas a la regulación. Ello se traduce en una disminución de 12 calorías y 2,7 gramos de azúcar comprados
En Colombia, durante 2021 se aprobaron nuevas normativas relacionadas con las temáticas de etiquetado nutricional y frontal de alimentos o productos para el consumo humano. La primera fue aprobada en junio de 2021, denominada Resolución 810 de 2021, “Por la cual se establece el reglamento técnico sobre los requisitos de etiquetado nutricional y frontal que deben cumplir los alimentos envasados para consumo humano” (
Parte del éxito de implementar una medida de intervención es el estudio de las condiciones psicológicas que condicionan el inicio del cambio de un determinado hábito y el mantenimiento de este. Ejemplo de ello es el modelo multiteórico, el cual se ha posicionado como una teoría sólida para predecir el consumo de agua pura en lugar de SSB. Su aplicación en una población universitaria evidenció que las construcciones de confianza conductual (
Por último, no menos importante, se encuentra el estudio del entorno como potencial determinante para el consumo de SSB y, por tanto, una variable relevante de intervención. El sector de los supermercados, por ejemplo, cumple un rol importante con la publicidad y promoción de estos. En EUA, un estudio de tipo transversal (n = 11.299 hogares) pudo evidenciar que un aumento de 10 puntos porcentuales en la frecuencia de promoción anual de SSB se asoció con un incremento del 13,7 % en las compras anuales
Una de las mayores limitaciones del presente estudio fue la poca evidencia científica encontrada en Colombia, Bogotá y PUJ, lo cual indica la importancia de continuar con la realización de estudios para abordar esta temática en estos ámbitos.
El consumo de SSB en el grupo de adolescentes y adultos está determinado por el conjunto de múltiples factores del contexto en el que nace, crece y se desarrolla un individuo. Dentro de los determinantes sociodemográficos más prevalentes que condicionan el consumo de estas bebidas son los bajos ingresos, ser adolescente o adulto joven, el sexo masculino, un nivel educativo inferior, ser afrocolombiano, los ambientes culturalmente diversos y la coexistencia de malnutrición por exceso.
El limitado conocimiento o información sobre la relación entre las SSB y la salud se manifiesta como el principal determinante cognitivo para su ingesta. Además, dentro de los determinantes del entorno prevalecen las elecciones alimentarias poco saludables aprendidas en la infancia, la disponibilidad de alimentos con alta densidad calórica, la presencia en los lugares de trabajo o estudio de máquinas dispensadores y la alimentación fuera del hogar, como factores que condicionan el consumo de las SSB. Adicionalmente, el consumo de tabaco y alcohol y el consumo elevado de otros ultraprocesados, junto con los comportamientos sedentarios frecuentes en adolescentes y estudiantes, y la interacción social, son determinantes conductuales relacionados positivamente con el consumo de SSB. Finalmente, con respecto a los determinantes ambientales, el mayor consumo de SSB se relaciona con los patrones familiares, la depresión, el estrés académico o laboral y los problemas emocionales.
Dadas las conclusiones anteriores, el desarrollo de medidas de intervención debe considerar un diagnóstico previo de la población objetivo y el entorno para poder obtener resultados deseables. Con esto en mente, las estrategias deberán elaborarse mediante un análisis multidisciplinario, y si bien está revisión mostró que el consumo de SSB está condicionado tanto por las preferencias alimentarias como por aspectos sociales, económicos, demográficos, cognitivos, psicológicos, ambientales y conductuales, una de las medidas de intervención más prometedoras es el impuesto a las SSB y el rotulado frontal, por sus resultados en el ámbito internacional. Sin embargo, a pesar de la reciente aprobación de la Resolución 810 de 2021, existe gran dificultad en Colombia para la aprobación y aplicación de otros proyectos de ley relacionados con la materia, al depender de las decisiones propias de las instituciones y las obstrucciones de las grandes industrias de alimentos.
Las autoras declaran no tener ningún conflicto de intereses para la realización del presente artículo.
Las autoras desean agradecer a los estudiantes de Práctica Integrada del primer semestre de 2021 de la PUJ, por su valiosa colaboración con la búsqueda de literatura de la temática estudiada.