Los tiempos del AT terminan inmersos en una tensión de espera e insatisfacción. Todas las esteras del pueblo elegido han puesto sus ojos en el futuro que imaginan más o menos cercano. Cada grupo sueña los nuevos tiempos de manera diferente. Hay, sin embargo, una nota común: la esperanza colmaría aspiraciones espirituales y tristezas históricas.