La reducción de la pobreza, ha sido durante largo tiempo uno de los objetos promovidos por la banca internacional de desarrollo. El Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) han propuesto un nuevo programa denominado las Estrategias para Reducción de la Pobreza (ERP) cuyo primer paso y principal mecanismo para ser implementado es desarrollar los "Documentos de Estrategias de Reducción de la Pobreza (DERP)", sobre los cuales este artículo presenta un análisis crítico.

El análisis de los requerimientos y alcances tanto del esquema ERP, como de los DERP lleva considerarlos como otros mecanismo de fuerte intervención en la política interna de los llamados países en vías de desarrollo, cuya implementación por demás, no deja ver posibilidades de éxito en su objetivo principal de reducir la pobreza.