En Hegel todo es hegeliano. Todo en este pensador es coherente consigo mismo y debe ser interpretado según los principios de su propia filosofía.

No se puede, por consiguiente, entender el sistema hegeliano o su filosofía sin haber entendido su método o su filosofar. Si en to­do filósofo sistema y método son inseparables, en Hegel se cumple esto estrictamente. Por otra parte el método hegeliano no se puede aprender a partir de otros métodos ni dé otros contenidos; es impo­sible concebirlo con categorías extrahegelianas. Si queremos acercar­nos al método de Hegel, tenemos que partir de él, y seguirlo. Reco­rrer con él ese "camino del alma", cómo llama a la FENOMENOLO­GÍA DEL ESPÍRITU o Ciencia de la Experiencia de la Conciencia.